Hoy la región está conmocionada por el delicado estado de salud en que se encuentra la cantante Ana del Castillo luego de sufrir graves heridas en un accidente de tránsito al norte de Valledupar.
Esperamos la pronta mejoría de esta joven, una artista integral que ha demostrado que tiene talento y, lo más importante, un carisma que le ha permitido ganarse el cariño de la gente. Así lo comprobamos en el concierto gratuito que a través de EL PILÓN se ofreció a los habitantes de la Ciudadela 450 Años el pasado 26 de diciembre. Con abrazos, fotos y besos de niños y adultos de ese popular sector de Valledupar quedó demostrado que está naciendo una nueva estrella del vallenato.
Es destacable que Ana María del Castillo Jiménez, con apenas 19 años, goce de un reconocimiento regional gracias a su potente y armoniosa voz, complementada por su belleza y baile en el escenario.
Es una artista que ha venido de menos a más, que ha ido escalado con pasos firmes en la competida industria de la música. Estuvo en un reallity de televisión nacional y a recientemente grabó a dúo con Iván Villazón.
Es la voz femenina del vallenato con mayor proyección, ya hay quienes la catalogan como la nueva ‘diosa’ del género, después de Patricia Teherán, pero esperamos que su carrera no termine igual; en un accidente de tránsito.
No pretendemos juzgarla por lo que pasó antes del siniestro, pero es inevitable mencionar que los excesos en los jóvenes artistas que empiezan a saborear las mieles del triunfo en muchas ocasiones arruinan sus carreras. A propósito de las mieles del triunfo, así se titula la canción que hace un llamado de reflexión a los artistas y su autor, el compositor Marciano Martínez, cantó con Ana horas antes del accidente en una parranda. Ella ingirió licor y luego salió en su camioneta nueva, aunque todo apunta a que el conductor era el cantante y modelo Juan Mindiola, quien por estar borracho fue detenido por el delito de lesiones personales agravadas. Dos prometedoras carreras que hoy están complicadas.
Sin embargo, en este caso no todo está dicho. Hay versiones que indican que el accidente tendría otros ingredientes, de violencia de género en el interior del vehículo antes del choque, hipótesis que debe ser materia de investigación por parte de las autoridades.
La artista hace unos días dijo en una entrevista a EL PILÓN que el machismo sigue en el folclor vallenato, comentario sustentado en los malos mensajes que surgieron en las redes sociales en su contra por el sensual baile que hizo durante uno de sus conciertos de carnaval. Y ahora su mala hora podría estar relacionada con agresiones en otro posible caso de machismo.
La verdad debe salir a flote. Esperamos que Ana se recupere y vuelva a concedernos una entrevista en la que pueda contar cómo seguirá su carrera artística al levantarse de la cama para volver a los escenarios como el ave fénix.
Nos unimos al sentimiento de tristeza que hoy embarga a sus familiares, amigos, seguidores y comunidad en general, pero los alentamos a no perder la fe y guardar la esperanza de que pronto volveremos a deleitarnos con la voz en vivo de la diva del vallenato.