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José Divantoque: Un ambientalista Vallenato en el anonimato

 

  •  “El cuidado medio ambiente es compromiso de todos”: José Divantoque 

Debido a los incendios forestales que se registran en el municipio y la contaminación ambiental que hay por lotes enmontados o basureros improvisados, el diario El Pilón entrevistó a José Divantoque Díaz, un hombre que a los 74 años, trabaja día a día por salvar el medioambiente, hace campañas preventivas con recursos propios y su labor la desarrolla desde el anonimato porque no cuenta con el apoyo de ninguna entidad, solo con el de sus hijos y algunos amigos.

Desde su oficina, en donde están decenas de trofeos y la bandera roja que identifica a su equipo de fútbol del alma, el Independiente Santa Fe, el bogotano José Divantoque habló sobre lo que ha hecho por Valledupar en cuestión ambiental.

El Pilón: ¿Cómo nació esta iniciativa de cuidar el medio ambiente?

José Divantoque Díaz: Esta tarea de ser ambientalista de tiempo completo, me la tomé yo mismo, preocupado por la situación ambiental que se vivía, del manejo de las basuras en los parques, en los colegios. Fui quien logró que se erradicara la quema de basuras en colegios como El Loperena, Manuela Beltrán, Francisco de Paula, Manuel Germán Cuello, entre otros, al igual que en algunos parques recreativos porque a las cuatro de la mañana, los vecinos apostaban a quien hiciera la fogata más grande, entonces yo me tomaba la atribución de ir a hablar con ellos, algunos me amenazaron, toda campaña trae riesgos y yo me las soportaba, lo único que les decía era Dios mío perdónalos porque no saben lo que hacen, pero poco a poco fueron entrando al cuento y ya estas quemas poco se ven.

EP: Sí, se ven poco, pero las hay, ¿qué dice de esto?

 JDD: Sí, estoy aterrado de como siguen las quemas en las fincas, que en los potreros hacen pilas de material de desecho y le echan candela, estos incendios no son producto de la temperatura, son producidos por las manos del hombre, la gente cree que metiéndole candela a la tierra la están limpiando pero no es así, está contaminando.

EP: ¿Cómo ha sido esa campaña liderada con recursos propios?

JDD: Todo el tiempo he trabajado con mis recursos, llegué a regalar más de mil camisetas, las mandaba a hacer por bloque de 50, dependiendo de mi capacidad económica, algunas se leía: ‘Cuidar el medioambiente es compromiso de todos’; en otras decía: ‘E l agua es vida, no sea pelota no la desperdicie’, así sucesivamente hice campañas ambientales y también en las camisetas de los equipos deportivos que patrociné, pero no pude sostener la parte económica de los equipos, pero continúo con la parte ambiental, porque las entidades del tema poco hacen al respecto.

EP: ¿Qué llamado le hace a la comunidad?

JDD: Decirle que el cuidado del medioambiente es un compromiso de todos, esto lo podemos divulgar por medio de los sacerdotes, pastores de la iglesia evangélica, para que en sus homilías o predicas le digan a la gente la importancia de cuidarlo, de no hacer quemas, no arrojar basuras, que pongan en práctica esto. Es que yo no he visto todavía al primer sacerdote o pastor que hable del medioambiente, quiero conocerles para trabajar unidos, para hacerles crear conciencia a la gente acerca de la parte ambiental porque así como vamos esto va a ser terrible.

EP: ¿Cree que ha valido la pena el trabajo que ha hecho durante estos 40 años de su vida?

JDD: Uff, sí, ha valido la pena.

EP: ¿Se lo han reconocido?

JDD: No ha habido quién, una vez me hicieron una invitación a la universidad con un profesor ambiental, y estuvieron escuchando mis propuestas y me dijeron que tenía razón en lo que decía, pero este es un trabajo que hago solo y lo hago porque me gusta. Hasta ahora es cuando las autoridades están tomando conciencia de esta parte y mandan mensajes televisivos y por radio de cuidar el medioambiente.

EP: ¿Qué piensa del incendio del cerro que está en inmediaciones de Valledupar?

JDD: De ese incendio forestal es culpable la comunidad, porque si una persona se da cuenta de que hay un conato de incendio, debe informar oportunamente, pero la mayoría nos quedamos callados, no tenemos sentido de pertenencia, después de que la candela coge viaje es difícil controlarla, aquí no tenemos aparatos aéreos, para apagar incendios, para esto no ha habido plata. Para reforestar eso que se está quemando, se necesitan como mínimo unos doce años, para tratar de recuperarlo porque la tierra queda árida, se han quemado los ácidos y aminoácidos, la quema lo que deja es ruina.

 


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