Por: Jacobo Solano
Twitter es un servicio digital de envío y respuesta de mensajes cortos, de 140 caracteres, que permite la interacción casi instantánea entre los usuarios. Pero más que una red social es una fuente de información, pues la mayoría de los medios la usa para divulgar sus publicaciones y mantener al tanto de lo que ocurre en tiempo real, es diferente a Facebook que a veces se queda en el banalismo y la falta de contenidos serios. Como herramienta periodística es indispensable; comunicador que no esté en Twitter, no existe, incluso algunos medios digitales han desarrollado sus propios sistemas de noticias de última hora, basándose en el concepto de estos mensajes cortos y rápidos. El mundo siguió paso a paso la tragedia de Japón a través de twiteros en diferentes puntos de la isla que enviaban mensajes instantáneos después de cada temblor.
La red que acaba de cumplir 5 años, ha atraído a más de 220 millones de usuarios, que buscan un nuevo modelo de información y que además quieren conocer de primera mano lo que hacen sus amigos y personalidades. Sin embargo, hay sujetos que malinterpretan esos beneficios y piensan que, por ser novedoso, usar este mecanismo es la respuesta para todo y se hacen cansones, como Silvestre Dangond que escribe hasta cuándo va a orinar, o peor aún, algunos resentidos que lo utilizan para divulgar información sin fundamento, visceral y rastrera, que raya en la ofensa, únicamente por hacerse notar, como me ocurrió ahora que estuvimos en la feria Expo Colombia Miami, en la cual los envidiosos de siempre se encarnizaron en enviar tweets ofensivos a mi cuenta. Pero Twitter es más que eso, ha servido para derrocar dictadores, conocer el estado del clima y organizar el tráfico en grandes ciudades, entre muchas otras cosas positivas.
Los gobernantes o personajes de la política lo utilizan como estrategia de comunicación y el que no está en esta red se puede considerar un dinosaurio, sobre todo cuando están en campaña, en Valledupar los más twitteros son Carlos “el Gordo” Muñoz, Pipe Araujo, Rubén Darío Carrillo y Robert Romero, quienes han sabido usar ese canal de información para dar a conocer sus proyectos. Las peleas en Twitter son muy buenas por ejemplo, se volvió común ver a políticos y otros personajes de la vida pública enfrentados. Es el caso del ex presidente Álvaro Uribe y los periodistas Daniel Coronell y León Valencia, un rifirrafe que todavía ocupa la atención en los principales medios del país, hasta Chávez que es anti yanqui tiene cuenta en Twitter, que tal.
Pero si se quiere ser un buen twittero hay que tener en cuenta los errores que pueden acabar una carrera: no pensar antes de twittear, sobre tragedias humanas y con errores de ortografía. Dos ejemplos que quedaron grabados en la historia de esta red fueron los de la ex miss universo Alicia Machado que clamó por la paz entre las dos chinas, refiriéndose a las dos Coreas, y el de Paulina Rubio, la cantante que publicó en su cuenta: “Chicos, quiero confesarles con mucha ilución, que van hacer tíos!!!”. La mexicana se excusó por la mala ortografía que, según ella, redactó una de sus asistentes, a propósito; un pecado aún mayor que un tweet inapropiado, es no asumir la responsabilidad. Para finalizar, si usted amigo lector todavía no tiene su cuenta en Twitter, es el momento de actualizarse para entrar en la dinámica de la nueva información.
Twitter:@JACOBOSOLANOC