Gran interés despierta en el municipio de Valledupar la suerte de 15 concejales ante la Procuraduría General de la Nación, por cuenta de la elección del Contralor Municipal. El proceso se encuentra en una etapa crucial, la recepción del testimonio del alcalde Augusto Ramírez fue ampliamente difundida por Radio Guatapurí y puede ser escuchada por cualquier persona en la página web de esa emisora.
La declaración del señor Ramírez Uhía proporciona elementos contundentes que demuestran efectivamente que el actual Contralor Municipal tenía una relación muy cercana al candidato por ‘Avanzar es Posible’ en las elecciones de octubre pasado; si bien es cierto el mandatario en su posición de declarante trata de ocultar cualquier relación de amistad con el señor Álvaro Castilla, reconoce sin titubeos que el responsable del control fiscal en el municipio mantuvo una relación con el actual alcalde en el contexto profesional debido a su experiencia en el tema electoral.
Sobre este punto debe indagar más el ministerio público, el Alcalde en su estrategia de defensa si trataba de ayudar a los concejales, se equivocó totalmente en su declaración, ante los cuestionamientos por la elección del señor Castilla además de aparecer en una fotografía el día de la inscripción como candidato de Ramírez Uhía, el presunto aporte a la campaña del gobernante de Valledupar, pueden surgir ahora otros interrogantes ¿El señor Castilla asesoró en materia electoral al actual Alcalde? ¿A qué se refiere el Alcalde cuando afirma que desde hace cinco años nace un deseo de tener una asesoría en materia electoral? ¿El señor Álvaro Castilla le brindó esa asesoría? ¿Esa asesoría tiene relación con las elecciones de octubre del 2015?
Los anteriores cuestionamientos deben ser aclarados en el proceso que gran revuelo causa en la ciudad de los Santos Reyes, porque si el señor Castilla brindó asesorías profesionales al señor Alcalde en virtud de la campaña política anterior estaríamos frente a una razón más por la cual su postulación y elección estaba revestida de serias causales que impedían asumir ese cargo; por lo que podría decir incluso que la relación de amistad es irrelevante ante una relación mucho más poderosa como el mismo Alcalde lo señala en el contexto profesional, si tenemos que el señor Castilla lo asesora directamente en los temas propios para su elección, mal podría este mismo señor ejercer un transparente control fiscal a la persona a quien asesoró en estrategias electorales.
Ahora bien, los señores concejales no estaban en la obligación de conocer a los asesores de la campaña a la Alcaldía del movimiento ‘Avanzar es Posible’, el pecado de los miembros de la corporación municipal está en votar por quien no obtuvo el mayor puntaje, en ese caso debían votar por el señor Omar Contreras como lo dejó sentado el año anterior el Consejo de Estado en la Sala de Consulta y Servicio Civil, con ponencia del magistrado Álvaro Namén Vargas, “la reforma al equilibrio de poderes modificó la elección de los contralores territoriales. Este acto legislativo estableció que su designación se haga a través de una convocatoria pública y no por ternas”. Por creer que estaban frente a una terna y podían elegir a su antojo hoy están expuestos a una sanción disciplinaria, esperemos un final feliz de esta novela; por el bien de Valledupar la renovación del Concejo casi en su totalidad y la justa designación de quien obtuvo el mayor puntaje para ser Contralor municipal.