La candidatura de Fredys Socarrás Reales ha causado todo tipo de reacciones en Valledupar. Hasta ahora es considerado por ciertos sectores como uno de los alcaldes de peor desempeño en la ciudad, mientras que otros celebran con alborozo su regreso a la competencia electoral por el primer cargo del municipio. Todo esto, tal vez, por haber ejercido uno de los mandatos más atípicos que haya vivido la capital del Cesar. Fredys Socarrás Reales, viceministro de Empleo y Pensiones y exalcalde de Valledupar, pone de nuevo su nombre a consideración como candidato a la Alcaldía Municipal. En Entrevistas EL PILÓN hablamos con él de sus logros que le reconoce la comunidad como las viviendas gratuitas, la avenida Sierra Nevada, megacolegios, programas sociales, y también de la malograda ciclorruta, el contrato con Natalia Springer y sus investigaciones por los lotes de Mercabastos. Escogió el corregimento de El Jabo para la entrevista.
Algunos consideran que su candidatura no debería existir. ¿Qué tiene para decir a todos aquellos que piensan que no debería estar aspirando a la Alcaldía de Valledupar nuevamente?
Yo creo que la gente tal vez de cierto barullo que realizan ciertos personajes de la vida política de Valledupar, que entiendan que me elegí con un movimiento ciudadano, sin partido político, que goberné de manera independiente y que organicé financieramente. No hay realizaciones tan importantes de tipo social como la que nosotros logramos para Valledupar y a veces eso es costoso cuando uno logra depurar financieramente un municipio, organizarlo, cuando uno logra tumbar dos concesiones que eran realmente lesivas para los intereses de los vallenatos. Nadie se había atrevido a tocar esos dos contratos que estaban a 20 años, pero además de eso, nosotros hicimos una gran labor social que transformó la pobreza de Valledupar y que la bajó de 42 % al 27 %, yo digo que uno servidor público cuando dirige un ente territorial, cuando lo gerencie, tiene que evaluarlo con número no con la malquerencia y si usted encuentra los números de Fredys Socarrás, fueron unos números que inclusive, me llevaron a ocupar el viceministerio de Empleo y Pensión, yo mantuve un desempleo de un dígito, no fue casualidad, fue un trabajo arduo, mancomunado con el gobierno nacional, la pobreza estuvo en el punto más bajo de este siglo, en 27; la inseguridad bajó tremendamente, nosotros tuvimos 816 atracos en el 2015, mientras que en el 2018 hubo 2.345, organizamos la ciudad, le dimos una oportunidad al mototaxismo, el transporte floreció, la ciudad quedó planificada. Entonces yo no creo que hallan razones en que no debía aspirar.
La mala imagen que tiene en algunos sectores obedece a otros aspectos un poco más finales en su gobierno. Por ejemplo: la ciclorruta, el caso de Natalia Springer. ¿Usted no cree más bien que la inquietud de la gente obedece a ese tipo de polémicas que a otras cosas?
Uno comete errores y tenemos lecciones aprendidas. Tenemos una experiencia como alcalde, pero también tememos una experiencia como viceministro de Empleo y de Pensiones. La ciclorruta costó 130 millones pesos y usted sabe que lo que tuvimos fue un bullying con representante a la Cámara y con un alcalde que llegó dispuesto a desmontarla, ¿cuándo ha visto usted en una ciudad de Europa o en Bogotá, en Cali o en Medellín, Barranquilla, que desmonten una ciclorruta?, si la ciclorruta es la inclusión social de los que menos tienen, que son los que caminan y los que van en bicicleta.
¿Pero hubo un error allí? ¿Usted no considera que hubo por lo menos uno mínimo?
Pudo haber pasado que la Secretaría de Obras de pronto no hizo la socialización adecuada, pero yo le cuento una cosa a usted hoy: la séptima de Bogotá, si los alcaldes se hubieran frenado por la resistencia de los comerciantes hoy no se estuviera disfrutando la séptima como se la está disfrutando, uno se la camina desde la 26 hasta la plaza de Bolívar, se volvió más segura, hoy la gente vende más porque la gente vitrinea y nosotros lo que hemos querido es que el que menos tiene en un territorio, es el que anda pie y anda en bicicleta porque las ciudades no son para los carros, las ciudades son para la gente.
¿Seguiría por el mismo camino si llega a ser alcalde?
La ciudad hay que seguirla llevando en ese plan 20-30 que hoy tiene unas tareas importantes. Por ejemplo, le digo cuál es uno de los planes que tiene Valledupar para los próximos años, el ecoparque sobre el río Guatapurí que es darle la mirada al río, Montería ya se lo está dando al río Sinú y Barranquilla se lo está dando al río Magdalena, hace falta que Valledupar recupere la margen derecha del río Guatapurí y la mire. Y el tema de la Escuela de Paz, una escuela hoy es modelo internacional, una escuela que trajo a más de 40 personas dignatarios, personalidades que han hecho parte de las experiencias de paz y fuimos 2.500 personas que nos formamos. Lamentablemente los medios frente a la gestión de Eduardo Montealegre y los servicios que le pudo prestar Natalia Springer, metieron el contrato de la Escuela de Paz, qué entre otras cosas, la Contraloría General de la Nación certificó que no se había perdido un peso. Fue un contrato que costó 1.400 millones pesos y que pudo haber costado 4 mil o cinco mil millones de pesos por la calidad que tuvo, pero que por fortuna pudimos hacerlos a costos muy bajos…
Existe una percepción en la ciudadanía de que “fue un mal alcalde porque no hizo obras”. ¿Eso es cierto?, y si no es cierto, ¿cómo se revierte eso en una campaña?
No, yo creo que no hay necesidad de revertirlo. Son pensamientos de una élite que se cree dueña de la verdad, pero vaya a los estratos socioeconómicos 1, 2 y 3 donde está el 70 % de la población y encontrará las realizaciones que nosotros hicimos. Una ciudad que se esforzó por darle solución habitacional a más de diez mil familias, un alcalde que se preocupó por construir megacolegios para que los niños tuvieran educación como la tienen educación los niños de los mejores colegios privados de Valledupar, un alcalde que se preocupó para que todo el mundo supiera leer y escribir y no se dejaran engañar de cualquiera, porque el que sabe leer y escribir se sabe defender, sabe general una cultura y unas costumbres y consolidar una identidad… Lo que hay es resultados por todos los sectores que queramos evaluar y es precisamente esta, el debate político que es una oportunidad para defender lo que hicimos, pero también para plantear que hoy tengo la suficiente experiencia para resolverle a Valledupar el problema de empleo, de emprendimiento, de poder generar con los recursos públicos que ya no vayan ni a parques ni a concreto, sino que vayan a la gente, poder establecer una propuesta para que los mototaxistas por ejemplo, podamos convertir 2.190 mototaxistas en microempresarios…
¿Qué propone para el empleo, seguridad, cultura?
Nosotros creemos que hay que hacer una inversión anual de 23 millones de dólares que son 230 en 10 años, que ojalá hagamos un pacto político por la empleabilidad y emprendimiento. Estamos graves en este problema que hoy tiene Valledupar y se refleja en una alta inseguridad.
Nosotros necesitamos generar a través de una buena calidad educativa, de una buena formación para el trabajo en nuestros jóvenes que hoy están en un nivel del desempleo del 23 % oportunidades para y ellos y poder generarles el primer empleo que hoy no se les está ofreciendo a los profesionales, a los tecnólogos y a los técnicos, nosotros vamos a ofrecer y ojalá contemos con el acompañamiento del gobernador que salga elegido, vamos a ofrecer mil empleos nuevos para profesionales, técnicos y tecnólogos, pero también vamos a ofrecer para mil practicantes en estos niveles educativos, la oportunidad que durante los cuatro años nosotros podamos atender con los recursos del municipio a dos mil jóvenes que por primera vez van a tener la experiencia laboral, acompañado del tema del mototaxismo, pero acompañado de toda una ruta de empleabilidad que tiene que ir de la mano con las competencias que hoy tiene Valledupar…
¿Cuál es la fórmula para la inseguridad, según su visión?
La formula es mejorar el ingreso, si hay ingreso la ciudad mejora y le quiero dar cidras porque esto hay que evaluarlo con cifras, si no hay cifras no hay nada.
En el 2015 hubo 816 atracos, en 2018, 2.345, entonces fíjese que se incrementó en el 187%, la pobreza subió y el desempleo se duplicó. Algo está pasando con los dineros públicos de Valledupar y del Cesar que no están generando oportunidades para la gente.
Entonces nosotros tenemos que mirar como dinamizamos la economía a través de una banca de oportunidades como tipo de cooperativas financieras que presten al 2 % mensual y no tengan que pagar el 30 % que hoy lo tienen que acceder a unos créditos que son de fondos criminales, dineros oscuros que hay que ofrecer para aniquilarlos, pues todo eso nos va a permitir a nosotros generar un gran volumen de oportunidades en el empleo, pero además tenemos que fortalecer la seguridad, tenemos 392 cámaras que yo dejé instaladas, la ciudad no tenía ni una sola cámara, hay que colgar más para completar las mil cámaras.
En una eventual gobernación de Luis Alberto Monsalvo y una eventual alcaldía de Fredys Socarrás Reales, que no les fue muy bien juntos, ¿qué podemos esperar de eso?
De pronto la relación de nosotros no fue fluida, no fue cordial, pero al gobernador se le autorizaron todas las obras que el quiso hacer en Valledupar, no hubo una que no se les autorizara. Es más, le cedimos parte del lote para que el hiciera el museo cultural, que no se hizo, no por culpa del alcalde sino por culpa del gobernador. Le apoyamos todo el proceso de la remodelación del estadio y este quedó frustrado, eso ya no es culpa del alcalde de Valledupar.
La Universidad Nacional, el atraso que hubo con los problemas contractuales no es el por el alcalde de Valledupar y yo si creo que uno como alcalde se atreva a no se subordinado por la familia Gnecco, creo que tiene un valor agregado, podemos trabajar alrededor de los intereses colectivos, porque nunca me unirá a Luis Alberto los intereses personales. Y otra cosa, es importante decirle a la gente que en materia de vivienda el gobernador quedó en deuda con Valledupar y no quedó en deuda porque Fredys Socarrás se opuso, sino porque las viviendas gratuitas el no quiso ceder a ellas porque los contratos se hacían en Valledupar y no en el Cesar, a mí no me interesaban los contratos sino las viviendas.
Usted prefiere a Kaleb Villalobos…
Yo estoy apoyando a Kaleb Villalobos, considero que es una mejor propuesta, una propuesta mucho más decente para Valledupar, mucho más dispuesta a hacer una inclusión social que necesita Valledupar.
El Cesar necesita un gobernador que sea sencillo, que le llegue a la gente y que lo puedan tocar durante los cuatro años.
Redacción / EL PILÓN