Muchos de los conceptos referentes a los temas urbanos no son de manejo ni de comprensión común. A pesar de que los tenemos presentes a diario, pasamos por encima de ellos. Los ignoramos sin meditar en su significado y en la importancia que tuvieron o más bien que podrían tener si los manejáramos con buen sentido.
Esta actitud es quizá la consecuencia de que, con muchos casos, estos conceptos son aparentemente abstractos y no lo hemos hecho evidente ante los ojos del ciudadano común y de nuestros visitantes, ni hemos insistido lo suficiente sobre ellos para que los profesionales y los responsables de la administración pública les den el reconocimiento que requieren. Dentro de esta categoría caben el espacio público, la renovación y los hitos urbanos, la conservación urbanística y finalmente la memoria urbana. Estos temas cuando entran a constituirse en símbolos de la ciudad, con los cuales se identifican a estos con determinados hechos históricos y arquitectónicos.
La plaza Alfonso López, el monumento a la Revolución en Marcha, la tarima Francisco El Hombre, el Colegio Nacional Loperena, la Escuela de Bellas Artes, la casa de los Maestre Pavajeau, el balneario Hurtado, la Iglesia de la Concepción donde se venera nuestro patrono Santo Eccehomo, la torre del campanario del convento Santo Domingo (actualmente donde está la Catedral), el Hotel Sicarare, el monumento Mi Pedazo de Acordeón, el Tractor, así debería llamarse, un alcalde irresponsable le cambió de nombre y puso un adefesio; seguimos con la Ceiba, el Hospital Rosario Pumarejo de López, el Coliseo Cubierto, los monumentos María Mulata y La Pilonera Mayor, por decir algunos, son ejemplo de edificaciones, monumentos o sitios que han llegado a constituirse en patrimonios urbanos respetados y significativos para los vallenatos y visitantes convirtiéndose en hitos identificables.
La historia de Valledupar en la sucesión de eventos que la constituyen, ha encontrado en los espacios urbanos, los lugares donde su gente se ha reunido a celebrar, a reclamar, a protestar o a tomar decisiones precisamente por el significado que estos representan.
Cuando los vallenatos se toman la plaza Alfonso López para un evento musical o político, se bañan en el río Guatapurí, su esparcimiento lo respalda ese sitio y ese aspecto simbólico. Estos eventos se cumplen en estos lugares y no en otros, por cuanto el lugar tiene un significado para sus habitantes, porque es allí a donde su manifestación tiene un sentido y no en otra parte. Una manifestación política que ya no se hace, que llene la plaza Alfonso López no tendrá la misma importancia si se hace en la plaza del Primero de Mayo.
La memoria urbana que nos recuerda nuestra historia, que nos dan el sentido de pertenencia, no tiene necesariamente un significado monumental. La casa de los Castro Monsalvo, donde nació Rosa Pumarejo Cotes, madre del presidente de la República Alfonso López Pumarejo, la casa donde se proclamó la independencia de la ciudad, la casa donde vivió Manuel Torres, donde habitó el general Félix Blanco, secretario privado del Libertador y donde habitó María Concepción Loperena de Fernández de Castro, son ejemplo de piezas únicas que entran en la categoría de memoria urbana.
Esta sutil condición que nos califica hace que la intervención a los arquitectos y planificadores tengan que hacerse a un enorme cuidado y responsabilidad con nuestra ciudad y se trata además de que estudiemos las posibles soluciones que permitan conservar al menos en parte la índole peculiar del centro de la ciudad; ese conjunto de callejuelas y casas antiguas, además del significado histórico, tiene una calidad arquitectónica y urbanística que muchas ciudades no han logrado tener.
Postdata: Buena por la Oficina de Planeación Municipal que comience a investigar a esas constructoras sinvergüenzas que se han robado lo que le han cedido al municipio de áreas de cesión. Ojalá se sigan tomando medidas contra la invasión de espacios públicos con las carpas en el balneario Hurtado, igual se continúe tomando medidas duras contra algunos irresponsables mototaxistas.