Alrededor de 100 taxistas de la capital del Cesar protestaron ayer contra la piratería en el transporte público, uniéndose así a la gran movilización realizada en 25 capitales del país.
El Terminal de Transportes, las glorietas María Mulata, Pilonera Mayor y Obelisco, fueron los puntos donde el gremio transportador se concentró. Los taxistas iniciaron a las 7:00 de la mañana la protesta para exigir medidas efectivas para enfrentar la piratería, en especial, la circulación de vehículos con plataforma Uber.
La mancha amarilla, que se movilizó por diversas calles de Valledupar, concluyó su recorrido en frente de la Alcaldía de Valledupar, donde realizaron un plantón con la intención de dialogar con el secretario de Tránsito Municipal, Víctor Arismendy y el alcalde de Valledupar, Augusto Daniel Ramírez Uhía.
El secretario de Tránsito Municipal, Víctor Arismendy, dijo que la protesta ha transcurrido en normalidad y que, desde la administración municipal se han realizado acciones contundentes para enfrentar la ilegalidad. “Hemos realizado inmovilizaciones, se han reforzado los controles y existen decretos que se están cumpliendo”, explicó el funcionario.
Ante la protesta del gremio de taxistas en diferentes ciudades del país, el Ministerio de Transporte a través de un comunicado reiteró que conforme a las leyes vigentes, para prestar un servicio público de transporte debe hacerse a través de empresas habilitadas y con vehículos debidamente autorizados. Cualquier prestación del servicio por fuera de esas condiciones es considerada ilegal.
Aunque el Ministerio de Transporte respeta el derecho a la protesta en el marco de las leyes, no deja de hacer un llamado para que este derecho no se ejerza afectando el libre tránsito de los ciudadanos, ni al usuario de aquellos taxis que decidan prestar el servicio de manera normal.
La entidad extendió su apoyo a los alcaldes de todo el país para que tomen las medidas necesarias, como primera autoridad local y de policía, para combatir la prestación de todo servicio de transporte considerado informal e ilegal.
Por Jennifer Polo / EL PILÓN