Reflexiones de Tío Chiro y Tío Nan:
Por: Aquilino Cotes Zuleta
Siempre le he escuchado decir al médico vallenato Pablo Morales Zamora que los padres son sabios y los abuelos, además de sabios, son hasta adivinos.
Muchos otros profesionales e investigadores o pedagogos me han confirmado que son muy ciertas esas dos expresiones y ratifican la proeza divina que también tienen los indígenas.
Sin embargo, “los conocimiento naturales” se han venido diluyendo frente a un mundo globalizado inmerso en un laberinto de innovaciones que le restan importancia a esas proezas empíricas que tienen padres, abuelos e indígenas.
Los abuelos siempre adivinan el futuro y los padres saben con quién hay que casarse, en qué universidad se debe estudiar, qué amistades nos convienen y hasta de qué enfermedad puede uno sufrir.
Los abuelos son tan adivinos que pueden fácilmente presagiar el destino fecundo o agónico que pueden tener los miembros de una misma familia. Podemos hoy citar cientos de cosas y para reconfirmar ilustremos esta columna periodística con ejemplos:
1.- Nuestros padres y abuelos nos prohíben bañarnos en un río si tenemos dolor de barriga: alegan que el ruido en el estomago es igual al ruido que lleva la corriente de un río y eso es fatal para la salud.
2.- Al pañal de un niño menor de 45 días de nacido no le puede dar sereno (después del mediodía ya es sereno).
3.- Si uno plancha una camisa o un pantalón no puede bañarse sino al día siguiente, tampoco puede tocar nada de metal (por el frío de ese metal).
Nuestros padres y abuelos también cuentan que, en sus épocas:
4.- Increíble pero cierto: Jugaban en la calle con una sola condición: volver a casa antes del anochecer. No había celulares… ¡Y nuestros padres no sabían dónde estábamos!.
5.- Esto era diario: Brazos enyesados, dientes partidos, raspones por todas partes, cabezas escalabradas (¿Alguien se quejaba de eso?. Nada de tutelas).
6.- Teníamos: Libertad, fracasos, éxitos y deberes: ¡…y aprendimos a lidiar con cada uno de ellos!.
7.- Compartíamos con nuestros amigos un pan o un dulce comprado en la tienda de la esquina, y nunca nadie murió por eso….
8.- Para verte con tú novia te volabas tres cercas, por los patios de tus vecinos y nadie te acribillaba cuando saltabas las cercas.
Ahora, a pesar de tantos saqueos y persecución a muerte contra la población indígena de nuestra región Caribe, también debemos mencionar aquí mitos y ritos de los aborígenes.
Según monseñor Felipe Arizmendi Esquivel, obispo de San Cristóbal de Las Casas (México): Los mitos son narraciones que se transmiten de generación en generación, que cuentan el origen del mundo y de los humanos, las primeras historias de la etnia. Es una manera de entrar en contacto con el más allá, con los seres invisibles, y de justificar la raíz de algunas costumbres y normas. No se pueden despreciar como cuentos que han inventado los antepasados, sino que son una forma de explicar el porqué de creencias y tradiciones, aunque no haya pruebas escritas de lo que se narra.
Los ritos son celebraciones o ceremonias para relacionarse con las fuerzas que nos superan, con la naturaleza, con espíritus, ángeles, santos, o con Dios. Son acciones simbólicas, oraciones y movimientos, con que el ser humano entra en contacto con otro mundo, en particular con Dios.
Muchos mitos y ritos giran en torno a los espíritus, a los dueños de los cerros o de los manantiales, a los seres invisibles, a la madre tierra y al padre sol, que en determinadas culturas, por no conocerlas a fondo, no distinguimos bien si los consideran dioses, o seres cercanos a Dios, o expresiones del amor de Dios.
Posdata: Lo contrario hoy es que no podemos caminar por las calles de la ciudad y en cada espacio público hay una prohibición y cada vez que entra un funcionario público a una entidad que tiene que ver con libre movilidad de los ciudadanos, lo primero que prohíbe es esa movilidad, como hoy ocurre en Valledupar.
Los invito a los predios del Palacio de Justicia para que vean el monumento a la inmovilidad e ineptitud ordenada y construida, al parecer, por extraterrestres del Municipio de Valledupar, Cesar Colombia.
Ojalá EL PILON lo muestre en una fotografía.
Hasta la próxima semana. tiochiro@hotmail.com