La implementación de los acuerdos de paz entre el Gobierno colombiano y las Farc tiene problemas y tomará más de 15 años dejarla lista para las nuevas generaciones, según lo reconoció el expresidente de Uruguay José ‘Pepe’ Mujica, luego de la reunión en Cartagena de la Comisión de Seguimiento, Impulso y Verificación a la Implementación de los Acuerdos de Paz.
Un mensaje esperanzador para los optimistas, pero inquietante para los que desde el inicio de las negociaciones en Cuba le han puesto trabas al proceso que permitió que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia pasaran de ser una guerrilla a un partido político.
En el encuentro también estuvo Felipe González Márquez, tercer presidente del Gobierno de España desde la reinstauración de la democracia, entre 1982 y 1996, y secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) desde 1974 hasta 1997.
La presencia de estos dos personajes en Colombia generó muchas críticas de integrantes del Centro Democrático, principalmente por el expresidente colombiano Álvaro Uribe Vélez. Ante los cuestionamientos a los esfuerzos por lograr la paz con las Farc, González le recordó que el presidente Juan Manuel Santos no ha sido el único dirigente del país que ha intentado pactar un acuerdo de paz con esa guerrilla, por lo que no entiende las críticas al actual Gobierno.
Los trinos del cacique de Centro Democrático también fueron respondidos por Mujica, quien llegó a ser presidente de Uruguay entre 2010 y 2015, con un pasado guerrillero en el que integró el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, exdiputado y exsenador, exministro de Ganadería, Agricultura y Pesca entre 2005 y 2008M; además líder del Movimiento de Participación Popular, sector mayoritario del partido de izquierda Frente Amplio.
“Está bien que Mujica haya sido criminal, que lo hubieran elegido presidente, pero viene a premiar al narcoterrorismo socio de Santos (sobornado por Farc), y a mentir. Que diga con quién guerrillero me reuní yo en Cartagena”, indicó Uribe en Twitter, a lo que Pepe respondió en una entrevista posterior:
“La paz también lo beneficia a él y sobre todo a su descendencia. Él (Uribe) puede colaborar, él puede ser decisivo, que se ponga un poco generoso”, afirmó y también pidió a los colombianos analizar si consideran que lo importante es cobrar cuentas viejas o arreglarles el porvenir a las nuevas generaciones.
Mujica, garante del proceso de paz, también cuestionó que se busque frenar lo acordado para ganar votos en esta temporada electoral.
“Conspira que estamos en campaña electoral y hay gente que está disputando el voto. Entonces mezcla la paz con un camino de conquistar el voto y se ensucia un poco la cancha”, sostuvo el exguerrillero uruguayo, quien además señaló que no ve a las antiguas cabecillas de las Farc en la presidencia.
Reflexionando sobre las posiciones encontradas que ha generado este evento en Cartagena vuelve a quedar claro para conseguir la verdadera paz estable y duradera no bastan los acuerdos políticos, lo esencial para ese objetivo es que en el corazón de los colombianos haya perdón y no se trata de olvidar, sino de recordar sin odios o resentimientos. Invitamos a los colombianos, sin importar el distingo político, a perdonar.