A la niñez (es decir, niñas y niños) en nuestro país le falta protección, o no la cuidan con el amor que merece. Esto es sumamente grave, porque es evidencia fehaciente de que la sociedad colombiana ha llegado al punto máximo de la degeneración social.
Según el estudio de la ONG Save The Children, sobre asesinatos de niños entre 2015 y 2017, a nivel mundial, Colombia es el tercer país con la tasa más alta de homicidio infantil, lo peor es que en nuestro país el maltrato intrafamiliar a la niñez es brutal, muchas veces con desenlace letal.
Según el susodicho estudio, realizado entre 175 países, cada ocho horas moría un niño o niña por asesinato, ahora la situación ha empeorado, ya que hace pocos días por noticia televisada informaron la estadística de un homicidio infantil cada tres horas y pareciera que seguimos impávidos ante tan terrible criminalidad.
Hace pocos días, en Manaure, hermoso pueblo de nuestro departamento enclavado en la serranía del Perijá, una niña asesinó a otra de una puñalada en el tórax y, según testigos, cuando estas niñas peleaban, la madre fue quien le pasó el cuchillo a su hija para que agrediera a la víctima mortal.
Recientemente, en el mismo pueblo, un hombre salió con su hijo de cuatro años y después regresa solo, diciendo que le habían dado escopolamina. Pero el cadáver del niño fue encontrado enterrado con un altarcito en el departamento de La Guajira entre Urumita y la Jagua del Pilar. Hay muchos indicios de que su propio padre lo mató, lo cual es materia de investigación por las autoridades competentes. Del pequeño difunto se sabe que nació en Venezuela de padre colombiano, quien por la difícil crisis que atraviesa el vecino país se refugió en Manaure en la casa de su madre.
Esto apenas son dos ejemplos de los tan frecuentes casos de macabros y aberrantes homicidios de niños que ocurren en nuestro país, donde maltratan a la niñez con sadismo, porque la niñez a menudo es sometida a la vileza del abuso sexual, pues en el país, las estadísticas reportan que cada día se cometen 48 agresiones sexuales contra los niños, principalmente a las niñas que a veces en la etapa de lactantes son violadas con desgarros que son causantes de mortalidad.
No obstante, al desenfreno cometido contra la población infantil, en nuestro país el clamor para castigar severamente a sus autores es cuantioso, tanto es así, que una líder política ya fallecida, fue senadora con altísima votación, porque era partidaria de la aplicación de condena perpetua a los abusadores de niños, incluso hasta una directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, pidió tal condena para escarmentar a los homicidas de infantes.
Teniendo en cuenta que, en Colombia, en el mes de abril se realizan eventos benéficos para la niñez. Comfacesar, en la última semana de este mes programa actividades para que los pequeños demuestren y desarrollen sus aptitudes y habilidades. Este es un proyecto nuevo en pro de la primera infancia, entre los 3 y 5 años, enfocado en las manifestaciones artísticas y culturales. Mis felicitaciones a Comfacesar por tan maravillosa gesta que, en algo, ayuda a combatir, las amenazas que asechan a nuestra niñez.