Luego de una misión exploratoria en el norte del Cesar por integrantes de la Federación Ganaderos del Cesar, Fegacesar, con apoyo de expertos de cooperación holandesa PUM, investigadores determinaron que el sector ganadero de la región es muy tradicional y exige la necesidad de modernizarse.
Así lo reiteró el profesional holandés en producción animal y experto en pastos tropicales, Hendrik Jansen, en el marco de un encuentro de ganaderos, quien afirmó que “la ganadería del Cesar requiere transformarse en el manejo y forma de producir. Es necesaria la modernización porque el mercado está cambiando y las producciones actualmente son muy bajas. Hay un problema con la alimentación porque no es de buena calidad y esto tiene que ver con deficiencias en los suelos”.
Por su parte, la coordinadora de Proyectos de Fegacesar, Polenka Lizz Palmera Arquez, precisó que tras visitar 12 fincas, con un promedio de 4.800 reses, percibieron tierras que no son preparadas y pastos inadecuados, que afectan en el crecimiento del bovino; determinando que la baja productividad del sector agropecuario, las brechas entre la investigación agropecuaria y la falta de asistencia técnica explican en gran parte la baja efectividad de los paquetes tecnológicos en el sector.
“Falta que el ganadero pase de ser tenedor de fincas a ser productor agropecuario. En la actualidad la mayoría de los ganaderos heredaron las tierras y tienen otros negocios, por lo que no ven las fincas como un tema de empresa, pero en el futuro deben hacerlo si quieren rentabilidad. El resultado de esta investigación es como un campanazo de alerta para que los ganadores visionen si quieren ser productores, si es así tienen que tecnificar, volverse empresa y volverse productivo”, subrayó.
Otro de los temas tocados por Palmera Arquez fue el celo bovino que presenta deficiencias en la región. “Uno de los efectos de la crisis de la ganadería en el departamento del Cesar es el largo ciclo productivo de una vaca, que comprende todas las fases y sucesos por las que secuencialmente pasan el ganado entre un parto y el parto siguiente. En el departamento, los períodos abiertos se dan hasta por 24 meses, cuando en una vaca en condiciones normales dicho período abierto es de 12 meses”, explicó.
Las investigaciones
Por lo anterior, Fegacesar adelantó junto con la Universidad del Norte y Colciencias una investigación para desarrollar un dispositivo que ayude a determinar con más certeza el momento en que la vaca está en celo para manejar la preñez, teniendo en cuenta que la pérdida de un celo significa para el ganadero una perdida aproximada de $680.000 al año.
“Mediante esta actividad conseguiremos un producto, una hoja de ruta, que nos indique una pautas sobre cómo afrontar el reto de procurar que la actividad ganadera no desaparezca, e incluso incremente sus valores de aportación al PIB (Producto Interno Bruto) departamental. La investigación, junto a la transferencia de conocimiento técnico y de procedimientos a los productores y trabajadores de las empresas ganaderas, son los pilares fundamentales para el desarrollo regional, lo cual será determinante para solucionar los problemas del sector bovino en el departamento del Cesar”, puntualizó la Coordinadora de Proyectos de Fegacesar.
Annelise Barriga Ramírez/EL PILÓN