Según el informe presentado por la organización Computadores para Educar, en el Cesar hay reporte de 33 tabletas y portátil robados de las instituciones educativas públicas entre el 2018 y lo que va en el 2019. A nivel nacional, 2.864 equipos fueron hurtados de sedes educativas.
El colegio con más hurtos reportados es la Institución La Inmaculada en la sede del Colegio María en el municipio de Chimichagua. Allí su rector reportó en el mes de marzo de este año el hurto de 11 tabletas. Ese mismo día se reportó el hurto de otra tableta en otra seda de la institución.
En segundo lugar aparece la Institución Educativa El Reposo de El Copey, donde el año pasado reportaron el robo de nueve tabletas. Bosconia, con ocho tabletas, Codazzi con dos hurtos, El Paso con una tableta y Aguachica con el único reporte de un portátil hurtado completan la lista.
En ese informe, Computadores para Educar alertó “a los rectores y docentes de las sedes educativas sobre el incremento en hurtos de computadores y tabletas en los establecimientos educativos del país”, además solicitó a la Policía Nacional “incrementar los dispositivos para capturar a las bandas que están operando en diferentes regiones de Colombia”.
Uno de los problemas en el Cesar es la contratación de vigilancia en las instituciones. El proyecto recién se adjudicó a finales de junio y empezó su servicio hasta el reinicio de clases luego de las vacaciones de mitad de año.
Aunque preocupa el hurto de estas tabletas en el Cesar, entregadas a los colegios para apoyar los procesos educativos, la cifra es baja en comparación con el departamento de Bolívar, donde hay registro de 276 aparatos.