La inseguridad, ¿cuestión de percepción o realidad? Ese sigue siendo el interrogante que hay en los vallenatos ante los reiterativos hechos delincuenciales que ocurren en diferentes sectores de la capital del Cesar.
Uno de los casos más recordados, que consternó a los ciudadanos ocurrió la tarde del 31 de mayo del año pasado, frente a un lavadero de carros ubicado en la calle 16B con carrera 14 del barrio Loperena, donde pistoleros atentaron contra la vida del comerciante José Manuel Abuchaibe Araújo, quien días después falleció en una clínica de la ciudad de Bucaramanga.
Ante el hecho, el comandante de la Policía del Cesar, coronel Diego Rosero, manifestó que en ese caso fue fundamental, además de la colaboración de la ciudadanía, el sistema de monitoreo y vigilancia del Centro Automático de Despacho, CDA, del Comando de Policía Cesar, donde se encuentran alrededor de 30 uniformados de la Policía que permanente monitorean las 396 cámaras de seguridad que están instaladas en puntos estratégicos de Valledupar.
Cámaras que entraron en funcionamiento desde el 19 de diciembre del 2015 tras una inversión conjunta del Ministerio de Interior y el Municipio con un costo superior a los $10 mil millones.
Sin embargo, en algunos sectores de la capital cesarense, siguen las opiniones divididas ante la efectividad de este sistema y es evidente el temor de los ciudadanos al salir a altas horas de la noche o portar accesorios lujosos fuera de sus viviendas, pues consideran que con las cámaras, poco ha disminuido este flagelo de los atracos en la capital cesarense.
“Si bien los aparatos tecnológicos en su momento intimidaron a los delincuentes, se siguen viendo igual o mayor cantidad de robos en los barrio haya o no cámaras”, manifestó Álvaro Arroyo, comerciante y abogado de profesión.
Según un informe entregado por el coronel Diego Rosero, en el año 2016 la Policía tuvo un total de 87 capturas, utilizando las cámaras de apoyo al modelo nacional de vigilancia comunitaria por cuadrantes; de las cuales 71 fueron en flagrancia y 16 por orden judicial.
En cuanto a incautaciones, fueron 17 las armas de fuego confiscadas, más de 400 gramos de marihuana, se recuperaron 42 vehículos y 30 motocicletas, al mismo tiempo se logró la recuperación de 18 celulares robados y con el apoyo de las cámaras se detectaron animales deambulando para un total de 50 recuperados.
A pocos días de finalizar el primer trimestre del 2017, el panorama no es muy alentador, pues, según el balance entregado a EL PILÓN por la Policía, solo se han capturado 17 personas, incautado cinco armas de fuego, recuperado 11 vehículos y ocho motos, con esta ayuda tecnológica.
Ante la inquietud sobre el normal funcionamiento de la totalidad de los aparatos tecnológicos, el oficial dijo que “actualmente, de las 393 cámaras, hay cinco en mantenimiento preventivo, mas no fuera de servicio, y de manera rutinaria se tendrán unas cinco a seis cámaras a las que se le va a hacer mantenimiento por parte de la empresa que se contrató para la implementación de este sistema, siendo este un número muy bajo”.
El encargado de vigilar y monitorear que el proyecto esté funcionando de la mejor manera, es la Secretaría de Gobierno Municipal, en cabeza de Sandra Cujia y la Oficina Asesora de Seguridad, dependencia de la misma.
Por ellos, Ramón Naranjo, asesor de seguridad de la Alcaldía, se refirió a lo que está haciendo la administración municipal para que esta estrategia sea sostenible económicamente.
“Actualmente nos encontramos proyectando unos convenios con la empresa Une Epm, que fue una de las encargadas de la instalación de los dispositivos de video, un proyecto de sostenimiento de toda la red de fibra óptica, que comprende 124 kilómetros, y sostenimiento de la sala CCTB. Se debe tener en cuenta que aún el proyecto tiene vigente la garantía”, explicó el funcionario
Así mismo indicó que se está haciendo convenios con los espacios libres de internet, “con eso vamos a contribuir a que la fibra óptica mejore su servicio porque solamente estamos subutilizando un 50 %, eso quiere decir que tenemos mucha más capacidad para trasladar la información”.
De igual manera, contó que hay otro proyecto pensado para aumentar el número de video cámaras y así garantizar aún más la seguridad.
“El actual sistema de seguridad por video cámaras vino con el gobierno anterior, que fue quien tuvo prácticamente toda la línea de aprendizaje de todo el proceso de contratación y hubo unas falencias que fueron corregidas en su momento. En la actual administración estamos montando un proyecto muy ambicioso para presentárselo al Ministerio donde tratamos de generar el fortalecimiento de la sala CCTB, circuito cerrado de información, este se basa en aumentar los puntos de cámaras porque no han sido suficientes, ya que los temas delictivos han mutado; de los puntos donde se daban mayores casos de inseguridad, ya están cubiertos por cámaras, por ende la delincuencia se ha trasladado”, agregó.
Adicionalmente, el asesor de seguridad contó que se está trabajando por la implementación de cámaras video analíticas, las cuales a través de un moderno software emiten un aviso a los policías sobre cualquier tipo de objetos sospechosos que sean dejados en la calle.
Otra de los proyectos con las cámaras, es el sistema de fotomultas. “Las cámaras solo hacen parte de un sistema de video vigilancia, no tienen ningún tipo de compromiso con temas de tránsito, a futuro sí se tiene proyectado un trabajo con cámara LPR, que ya son de identificación de placas con un nuevo software, pero ya eso es un proceso distinto”, aclaró.
De las 393 cámaras de video vigilancia que tiene Valledupar, hay cinco en mantenimiento preventivo mas no en fuera de servicio, por lo que las autoridades aclaran que el sistema funciona al ciento por ciento.
PUNTOS DE VISTA
¿Cree que las cámaras ayudan a disminuir la inseguridad?
Orestes Oñate.
“Estamos acorralados por la delincuencia y si las autoridades no se ayudan con esa tecnología pues estamos muy mal, porque se siguen viendo muchos casos en distintos sectores de la ciudad”.
Omar Oñate.
“En cuanto a seguridad, no hemos mejorado mucho, las cámaras contribuyen a la captura de los delincuentes que comenten las fechorías pero el hurto callejero no se ve que disminuya”.
Eludis Córdoba.
“La seguridad en Valledupar es malísima, fui víctima de los delincuentes en pleno centro de la ciudad, uno ahora tiene que usar bolsos baratos y sin nada adentro porque lo que siempre dicen es no den papaya”.
¿Cómo surgió el proyecto?
Pese a la multitud de críticas e incredulidades que rodearon el proyecto de las 393 cámaras de seguridad de Valledupar, para el 2015, se dio la puesta en marcha del mismo y fue Miguel Villazón Blay, asesor de seguridad de la anterior administración municipal, uno sus gestores, quien contó que este se dio ante el clamor de los ciudadanos por unas mejores condiciones de seguridad, y luego de un proyecto similar que fracasó en el 2005 por falta de planeación.
“Entregamos a los vallenatos un sistema dotado de la mejor tecnología; lo que brinda las cámaras es que en cada sitio donde están las personas se sienten seguras y además le genera la duda al delincuente si va a ser grabado por esta o no, además han servido en los temas de persecución y seguimiento a personas por parte de la Policía”, dijo el politólogo que actualmente es gerente de la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, Cesar.
Por Jennifer Polo / EL PILÓN