La mañana del jueves 27 de abril, se dio inicio a la primera ronda y eliminatoria del concurso de Piqueria Infantil en el Centro Comercial Unicentro de Valledupar.
En total, 7 participantes se inscribieron a esta categoría. Sucre, Antioquia, La Guajira y Venezuela son los territorios que representarán estos niños promesas.
En esta versión 56 del Festival de la Leyenda Vallenata en homenaje a Luis Enrique ‘El Pollo Vallenato’, tres niñas decidieron enfrentarse en esta categoría mixta para obtener la corona de reina infantil de Piqueria.
Esta categoría, en este 2023, cuenta con el concursante más joven de todo el festival, se trata de Lucas Sebastián Vega Fernández, nacido en Fonseca, La Guajira, quien tiene 7 años de edad.
Los hermanos Guanipa Álvarez, oriundos de Venezuela pero residentes en Fonseca, La Guajira, buscan llevarse la corona en esta versión 56 del Festival Vallenato.
LOS HERMANOS QUE SE ‘PELEAN’ LA CORONA
Amparados bajo la bendición y la enseñanza de Alcides Manjarrez, los hermanos Calianys de los Ángeles y Samuel Alejandro Guanipa Álvarez, nativos de Venezuela, pero residentes en Fonseca, La Guajira, hace más de 9 años, se inscribieron en esta versión del Festival Vallenato para ‘pelearse’ la corona de rey o reina de Piqueria Infantil.
Alcides Manjarrez, uno de los juglares de la Piqueria, ha sido el maestro de los hermanos Guanipa durante 3 años.
Sobre la posibilidad de tener que enfrentarse en una ronda con su hermana menor, Samuel señaló que se sentiría distinto, sin embargo, su propósito de este año es coronarse rey.
De acuerdo con sus relatos, aprendieron a versear hace 3 años, cuando el juglar de este género Alcides Manjarrez, decidió empezarlos a instruir. “Las clases son muy divertidas. Nos explica la vocalización, las palabras que son rimas asonantes y consonantes; nos enseña décimas, pie forzado, y demás. Si pudiera elegir a otro profesor, yo no cambiaría al mío por nada”, expresó Calianys.
Su madre, quien vende café en las calles de Fonseca, contó al diario EL PILÓN que tras llegar de Venezuela, Alcides se convirtió en el padre que Colombia le regaló. Tanto fue el mutuo cariño que, en medio de la pandemia originada por el COVID-19, cuando llamaron al verseador invidente de la Radiodifusora de Colombia para que hiciera un video tutorial de piqueria, pensó inmediatamente en los dos hermanos.
“Me pidieron que hiciera el video con niños, y pensé en ellos, aunque la mamá tenía miedo de que el niño ‘hiciera el oso’, pero yo le dije que él podía darnos una sorpresa, y así fue. Después de eso decidí enseñarles a versear. El primer día de clases, en dos horas, me hicieron 1 verso cada uno. Fue un proceso largo porque ellos son venezolanos y tocaba enseñarles las melodías y las costumbres de la piqueria. Pero me siento orgulloso porque soy el primer verseador que forma una escuela de piqueria y dos de sus estudiantes son venezolanos”, mencionó Alcides en medio de la entrevista.
Aunque en la versión 55 del Festival Vallenato los dos hermanos se presentaron, solo Calianys logró pasar a la final, sin embargo, no ganó. “Este año nos prometimos que nos llevaríamos la corona de Piqueria Infantil”, afirmó la madre de los menores.
Por otro lado, los hermanos se han presentado en festivales de Fonseca, Urumita, San Juan del Cesar y Patillal, donde han obtenido segundos y terceros puestos.
LA DISPUTA ENTRE DOS MUJERES
En medio de su presentación, Calianys se enfrentó a Heilyn Lucía Gil, oriunda de San Carlos Carlos, Sucre. En la categoría de verso libre, la niña de 12 años logró dejar sin argumentos a su contrincante.
“Esto queda demostrado, mira que te estoy cantando, cuida’o y sales llorando como el año pasado”, le dijo Calianys.
Ante esto, su rival, Heliyn, le respondió: “Mi nombre es Heilyn Lucía, como tú muy bien sabei’, y canto con alegría en la versión 56”.
Inmediatamente, la estudiante de Alcides le contestó: “Te lo hago entender, o acaso que no lo vei’, si no sabes responder mejor ya no te montei’”. Tras finalizar ahí su presentación, los aplausos no se hicieron esperar.
Ante esto, Guanipa Álvarez expresó a esta casa editorial: “Lo sentí como una ventaja porque fue una forma de agarre para contestarle, además, eso le baja puntos a ella porque no me contestó, y a mí me suma porque le contesté diciéndole que no me respondió”.
Sobre esto, y a manera de conclusión, Manjarrez aseveró que sus estudiantes están preparados para competir contra cualquier rival. “Yo soy de los instructores que no les enseña versos a los niños, yo les enseño cómo hacerlos; porque si se los hago para que ellos los repitan, no van a improvisar sino que van a cantar versos aprendidos”.
Por Ketty Gutiérrez