A pesar de que el Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, no ha hecho pública la cifra de inscripción de áreas para la siembra de arroz en el país, existe un balance positivo sobre la participación con relación a este cultivo.
De acuerdo con Jairo Chinás, director ejecutivo de la seccional de arroz Valledupar y Fundación, la muestra de que hubo un alto número de inscripciones se evidencia en que las fechas para dicho propósito se cerraron antes del tiempo estipulado: 30 de abril.
“Lo que sabemos es que la meta de inscripción de áreas, que eran de 478.000 hectáreas para el 2019 y que esa meta se cumplió”, dijo.
Este proceso da la oportunidad a los empresarios de este cultivo de participar dentro de los posibles beneficios que otorgue el Gobierno nacional que se ha planteado el apoyo a la comercialización o incentivos de almacenamiento que favorecerían a los primeros inscritos.
También esto representa la oportunidad de que se organice más el cultivo de arroz de manera que se exprese el potencial de rendimiento y que la productividad aumente teniendo las condiciones favorables.
A nivel departamental Chinás reconoció que hubo una reducción del área en el Cesar que ha sido causada básicamente por condiciones climáticas y la situación financiera de algunos productores que venían de cosechas regulares y han tenido que sortear compromisos financieros.