X

Saquemos los Juegos Bolivarianos a las calles de Valledupar

En julio de 2019, Valledupar fue oficializada como la sede de los Juegos Bolivarianos 2021. La designación se hizo durante la Asamblea Extraordinaria de la Organización Deportiva Bolivariana -Odebo- en Lima, Perú, tras la postulación y sustentación que hizo la dirigencia del Cesar para obtener este logro.

En la ciudad, dicha designación se celebró con bombos y platillos. No era para menos. Valledupar, de antemano, dio un paso adelante asumiendo este compromiso deportivo. Pero por la pandemia los juegos se aplazaron para el 2022.

Ahora, más allá de las discusiones políticas, diferencias de opinión, contratiempos en algunas obras, todo indica que Valledupar será la sede principal de los Juegos Bolivarianos 2022, donde cientos de deportistas llegarán a la ciudad; con ellos vendrán medios de comunicación, turistas, empresarios, entre otros sectores, que dinamizarán nuestra economía. Un beneficio para todos. Nadie pierde.

El anterior beneficio sin contar el legado material e inmaterial que dejan los juegos: además del espíritu deportivo, algo que no se mide pero que sí da resultado, contagia y sirve de inspiración para los futuros deportistas del Cesar, en Valledupar quedarán escenarios deportivos de alta calidad que seguramente, en los próximos años, serán sede de grandes eventos nacionales. Pero, sobre todo, serán la primera casa de los deportistas que surjan en la ciudad. Ese es el mayor legado de los juegos.

Cabe recordar que del Cesar, la capital Valledupar no será la única ciudad que recibirá las justas deportivas, ya que el municipio de Chimichagua será sede de las competencias de aguas abiertas, por lo que en dicha municipalidad las inversiones están encaminadas en el arreglo de su vía principal, para las competencias de triatlón, y la refacción del muelle.

Pero parece que muchos ignoran la importancia de esta competencia. Parece que los Juegos Bolivarianos son de unos pocos. No. La realización de los Juegos Bolivarianos es una responsabilidad de todos. Y si como ciudad nos vamos a beneficiar, todos debemos trabajar por su materialización exitosa: está en juego el nombre de Valledupar como realizadora de grandes eventos.

Ahora bien, la entidad deportiva debe, lo antes posible, sacar los Juegos Bolivarianos a las calles, explicarle a las personas la grandeza del evento que está por suceder en nuestro territorio. Una vez la comunidad vallenata entienda la magnitud y se enamore de este evento, no hay vuelta atrás: la competencia será un éxito.

Es posible sacar este evento adelante. Tal parece que de las seis obras pendientes, dos se construyen en la Universidad Popular del Cesar, como son las piscinas olímpicas y el coliseo multifuncional de gimnasia, las cuales llevan un avance del diez por ciento de ejecución. Dos de los cuatro proyectos restantes estarán en la Unidad Deportiva Oscar Muñoz, espacio en el que el gobierno departamental construirá el coliseo de baloncesto, al igual que el estadio de béisbol Erasmo Camacho Calamar, del cual se anunció recién que iniciará obras la primera semana de noviembre.

Saquemos los Juegos Bolivarianos a los barrios de Valledupar; que todas las comunas se vistan con los colores de la organización.

Categories: Editorial
Redacción El Pilón: