I
Rosa Emilia Villazón,
pureza de fina estampa,
en su alma nunca escampa
la fe de su devoción
por Santo Ecce Homo El Patrón
de esta gran feligresía.
Sus padres Miguel María
y doña Julia Baquero
veneraron con esmero
la sagrada eucaristía.
II
La educación religiosa
fue en la Sagrada Familia,
eran ramos en vigilias
aquellas horas hermosas.
Sus compañeras piadosas
son recuerdos a la vista:
mi madre Juana Bautista,
de rodilla en el altar,
y al momento de cantar
Carmen Montero en la lista.
III
Rosa Villazón Baquero
de distinguido linaje;
Valledupar el paisaje
de sus sueños y senderos.
Para su alma un lucero
su esposo querido fue,
don Tirso Maya Brugés
el padre de sus amores:
Tres hijas, sagradas flores,
y el hijo, Edgardo José.
IV
Todos los días son santos
cuando se vive en familia,
así decía Rosa Emilia
con la ternura de un canto.
El amor vence quebrantos
de Juan Bosco repetía:
La fe es tierna alegría,
es bendición del Señor,
si en el hogar hay amor
no existe melancolía.