Hace 11 años, a causa de un paro respiratorio, murió el reconocido locutor ‘La Serpiente Esplumada’.
Régulo Pineda, locutor de Radio Guatapurí, nació en el año 1933. Después de haber vivido en varias partes de Colombia se radicó en Valledupar en el año 58.
En 1963 inició a trabajar al lado de Manuel Pineda Bastidas como locutor en Radio Guatapurí, una de las emisoras más queridas y tradicionales de Valledupar y en donde permaneció por más de 30 años.
Considerado como una de las mejores voces cesarenses, hoy, 11 años después de su muerte, aún es recordado por sus familiares, amigos y colegas.
“Hoy se cumplen 11 años de la muerte del amigo, hermano, colega y gran maestro de la radio, Régulo Pineda Dávila, ‘La Serpiente Esplumada’, que estés a la diestra del Señor con tu querida esposa, Maura”, recordó Jaime Pérez Parodi en sus redes sociales.
Régulo era lector exclusivo de los comerciales del noticiero ‘La Tribuna del Cesar’ y dirigió por muchos años los programas ‘Sobremesa’ y ‘Boleros, solamente Boleros’.
Además, su voz es recordada por el famoso Ángelus: “Doce en punto… mediodía…el ángel del Señor anunció a María y ella concibió por obra y gracia del Espíritu Santo… Dios te salve María…”.
El locutor fue uno de los gestores de la Radio Guatapurí que se convirtió en pionera de la Radio Cesarense y academia de muchos locutores y periodistas de la región y otras ciudades.
Además de eso, Pineda Dávila trajo a Valledupar grandes locutores como Alberto Colinas, Andrés Salcedo, Alfonso Ávila, entre otros.
‘LA SERPIENTE ESPLUMADA’
‘La Serpiente Esplumada’, apodo que le pusieron sus compañeros gracias a un episodio que ellos mismos relataron, luego del episodio en el Bar Águila, donde Pineda se encontraba departiendo con sus amigos, de repente comenzó a salir candela y el establecimiento se incineró totalmente.
Todos salieron corriendo y se olvidaron de Régulo, quien debido a su discapacidad no podía correr. Cuando el fuego fue controlado empezaron a buscarlo, pero no aparecía por lo que imaginaron se había incinerado dentro del bar.
Cuando fueron a contarle a su esposa, casi llorando se dieron cuenta que Régulo estaba durmiendo y no se explicaban cómo había salido por eso fue comparado con la ‘Serpiente esplumada’ por lo que lo bautizaron con ese apodo.
En el lecho de su muerte así lo recordó el periodista y locutor, José Luis Parada: “Régulo Pineda Dávila es considerado como una de las mejores voces de la radio cesarense; era el único encargado de los comerciales, su voz permanecerá viva con el Ángelus. Para mí era una persona muy sencilla, amable, cordial, amigo de sus amigos y un gran compañero, a quien le gustaban las cosas bien hechas”.