En aras de reconocer a las mujeres y personas Lgbti, víctimas de las violencias sexuales en el conflicto armado, con particular énfasis en las mujeres negras afrocolombianas e indígenas, la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición realizó un encuentro denominado ‘Mi Cuerpo Dice la Verdad’, que tuvo lugar en el Teatro Adolfo Mejía de Cartagena.
En la actividad estuvieron presentes algunas de las féminas que hacen parte de los 1.730 casos de víctimas de violencia sexual, en el marco del conflicto armado, que se registraron en Cesar y La Guajira desde 1985 hasta 2018.
“A pesar de las denuncias e investigaciones promovidas por diferentes sectores, se presume que hay muchos casos sin registrar. Sin embargo, son hechos que han quedado marcados en los cuerpos de quienes han sido víctimas, debido a que las violencias sexuales fueron un arma de control, una manera de ratificar el dominio sobre el adversario y una violación directa sobre la intimidad”, explicó la coordinadora territorial de la Comisión de la Verdad, seccional Cesar-La Guajira, Ana María Ferrer Arroyo.
Agregó que los impactos han sido tanto individuales como colectivos, esbozando que el encuentro ‘Mi Cuerpo Dice La Verdad’ también fue un acto de reconocimiento a las organizaciones que han acompañado a las víctimas cuando esta práctica era silenciada, que contó además de la activa participación de víctimas del conflicto armado, movimientos, organizaciones sociales, entidades del Estado, agencias de cooperación internacional y portavoces internacionales.
El acto de reconocimiento incluyó un espacio cultural en la plaza de San Pedro Claver, en el centro histórico de Cartagena. La jornada contó con expresiones artísticas de los Tambores del Cabildo, las Tamboreras del Cauca, Kombilesa Mi, Las Mujeres Chapetúas, Aterciopelados Acústico y un monólogo de Alejandra Borrero.
“Como parte de nuestro compromiso por comprender los impactos y dinámicas en los que estuvo inmerso el país durante el conflicto armado, la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición dio inicio a una serie de Encuentros por la Verdad, que son espacios para la reflexión y comprensión de los daños, impactos del conflicto y de las diversas formas en que las víctimas y las comunidades han afrontado la violencia y resistido. Están dirigidos a que los participantes tengan un espacio de diálogo social e institucional que conduzca a darle visibilidad al dolor emocional que el conflicto armado produjo”, precisó Ferrer Arroyo.
ANNELISE BARRIGA RAMÍREZ/EL PILÓN
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