X

¿Qué haces, Dios?

“¡Ay del que, no siendo más que un tiesto, pleitea con su Hacedor! Dirá el barro al que lo modela: ¿Qué haces? Isaías 45,9.

Algunas veces al percatarnos de las cosas difíciles que estamos experimentando, le decimos a Dios: “¿Qué estás haciendo? ¿Por qué no me respondes?”.

Estamos acostumbrados a que nos animen, nos motiven, nos proclamen bendiciones o nos den una palabra de fe, nos recuerden una promesa divina, todo lo que tenga que ver con nuestro propio beneficio. Pero ¿Qué tal si Dios simplemente no responde y no sabemos qué hace?

Fe no es creer sólo cuando Dios responde o sólo cuando veo que todo va excelente, Fe es creer a pesar de no ver, Fe es confiar a pesar de ver todo en contra, Fe es creer aunque Dios no responda, o no sepamos qué hace.

He pasado por momentos de angustia, enfermedad, escases, por situaciones que me roban la paz y orando a Dios he deseado que Él me respondiera; pero simplemente Él no lo hace cuando yo he querido. Entonces, en medio de esos momentos de enojo, frustración y angustia, he entendido que no se trata de lo que yo quiera, ni cuándo lo quiera, ni cómo lo quiera, sino de creer, a pesar de cualquier cosa.

He llorado en su presencia preguntándole el por qué de muchas cosas, me he humillado para poder entender algunos sucesos de mi vida y a pesar de todo ello a veces simplemente no lo he entendido; sólo me queda elaborar el significado y encontrar el sentido del “para qué”, y con la lección aprendida, poder ayudar a otros que estén pasando por lo mismo.

Israel, a través de la historia ha pasado por momentos muy difíciles, y a pesar de eso, Dios no ha respondido en algunos momentos o ha callado. Hay experiencias que tenemos que enfrentar como cualquier otra persona, no hay un privilegio especial para no pasar en esta tierra cualquier cosa que cualquier humano puede pasar. Sin embargo, y a pesar que nos puede pasar muchas cosas mientras vivamos, tenemos por la fe, la esperanza maravillosa de que un día estaremos junto al Señor por toda la eternidad.

Amados amigos: No sé qué momento puedas estar experimentado el día de hoy, no sé qué es lo que abate tu alma, ni mucho menos conozco la situación difícil que puedas estar viviendo; pero aunque no sepas qué hace Dios, nunca desconfíes de su forma de actuar. Puede ser que todo se nos ponga en contra, que las puertas se nos cierren, que los recursos se nos acaben, pero aun con todo eso, Dios sigue allí, pendiente de nuestra necesidad. Él actuará, porque Él tiene cuidado de los suyos.

Pedro el Apóstol, le dijo una vez al Señor Jesús: “¿Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna”. Job, en medio de su crisis total dijo: “He aquí, aunque él me matare, en él esperaré”. El Apóstol Pablo decía: “Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia”. ¡Nuestra fe no depende de una respuesta especifica, sino del Dios de las respuestas!

Hoy quiero animarte a que confíes, a que no dejes de creer en lo que Dios está haciendo, a pesar de no ver lo que quisieras ver, confía, porque tu confianza y tu dependencia a Él será la clave para ver mayores resultados de los que te puedas imaginar.

¿Sabes qué está haciendo Dios? ¡Él está trabajando en tu vida!
Abrazos y muchas bendiciones en Cristo.

Categories: Columnista
Valerio_Mejia_Araujo: