Mientras más avanza el Plan Nacional de Vacunación, que actualmente está en la etapa 3, una de las preguntas que más se hacen las personas antes y después de ser vacunadas contra el covid-19 es si el consumir alcohol puede llegar a afectar la respuesta inmune de la vacuna.
Entre esas preguntas relacionadas al consumo de alcohol después de la vacunación están: ¿puedo consumir alcohol después de aplicarme la vacuna?, ¿cuánto tiempo, tras aplicada la vacuna, debo esperar para consumir alcohol?, ¿qué cantidad?, ¿el consumo de alcohol debilita la respuesta inmunológica del cuerpo?, entre otras.
De momento los desarrolladores de vacunas y agencias reguladoras de los países no han dado ninguna recomendación frente al consumo de alcohol tras la vacunación y los ensayos clínicos de las vacunas contra el coronavirus tampoco analizaron si el alcohol tenía algún impacto en su eficacia.
Los expertos señalan que lo importante es que las personas que estén recibiendo vacunas hagan todo lo posible para maximizar su respuesta inmunitaria. Es por esto que las distintas organizaciones y expertos sobre el consumo de alcohol y la vacunación señalan que todo depende de la cantidad de alcohol que se consuma.
Si bien, de momento no hay pruebas de que tomar una cantidad pequeña de alcohol pueda reducir la eficacia de cualquiera de las vacunas contra el covid-19 que se administran en Colombia, si hay estudios que aseguran que el consumo excesivo de alcohol podría suprimir el sistema inmune e interferir en la respuesta de las vacuna, sin importar que tipo de vacuna sea.
Ilhem Messaoudi, directora del Centro de Investigación de Virus de la Universidad de California, afirmó que es importante ser consciente de lo que significa realmente beber con moderación. “Es peligroso beber grandes cantidades de alcohol porque los efectos en todos los sistemas biológicos, incluido el sistema inmunitario, son bastante graves y se producen con bastante rapidez una vez que se sale de esa zona moderada”, explicó al New York Times.
Por otro lado, Rosa María Wong, del Laboratorio de Investigación en Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México, aseguró que “el exceso (de alcohol) puede interferir en la respuesta inmunológica, pero con un consumo moderado no pasa nada”.
Wong añadió que los posibles efectos secundarios de las vacunas como fiebre, dolor corporal, malestar, dolor de cabeza o vómito pueden ser confundidos con síntomas del ‘guayabo’ y enmascarar o potenciar los efectos secundarios de la vacuna, por lo que se recomienda no tomar alcohol en 72 horas, es decir, en 3 días.
Sobre lo que se define como consumo excesivo de alcohol, el Instituto Nacional del Abuso del Alcohol y el Alcoholismo de Estados Unidos lo definió en dos bebidas al día para los hombres y una para las mujeres. En cuanto a la cantidad de las bebidas, según el mismo instituto, es 148 mililitros de vino, 44 mililitros de licores destilados o 355 mililitros de cerveza.