Los intereses del Cesar y su dirigencia en carreteras no se deben limitar a las de su circunscripción territorial. Es bueno el ejercicio que se inició entre el gobierno nacional, a través del Ministerio del ramo, y el gobierno departamental y los municipios del Cesar. Esas conversaciones han contado con la presencia de parte de los congresistas cesarenses y esperamos que se desarrollen con la totalidad de ellos, de todo origen político, participen de la definición de prioridades.
Un papel participativo deberían también tener, en la formulación de los proyectos prioritarios, la Asamblea Departamental, los partidos, los gremios, en especial los ingenieros y transportadores, y las organizaciones sociales. No puede ser esta una relación de altos poderes en la que líderes sociales sean desconocidos cuando el grueso de estos apoyaron las iniciativas del pacto político responsable del nuevo gobierno central.
Ansiamos que los proyectos metropolitanos se lleven a cabo, empezando por la segunda calzada Valledupar – La Paz, y los anillos viales de circunvalación que hagan más fluido el tránsito local y regional. Estos deben responder a la participación y socializaciones ciudadanas amplias, y que se correspondan con los planes nacionales, departamentales, metropolitanos y municipales, y sus aspectos sociales y ambientales.
Los pasos de vías nacionales por la ciudad deben ser construidos por la Nación, como se han hecho en el resto de ciudades. En la Costa lo vemos en las ciudades capitales, menos, desventajosamente, en Valledupar.
No olvidemos tampoco Codazzi – Cuatro Vientos en la que se ha avanzado en pavimentar el 70% de sus 64 kilómetros. Y la conclusión por el INVIAS de la vital transversal de Ocaña – Aguachica – Gamarra, que fue excluida por la ANI, en las postrimerías del gobierno Duque, de la concesión de la troncal del Magdalena, tramo antiguo de la fracasada Ruta del Sol II.
En anterior editorial propusimos un Plan Vial del Cesar 2, complementario del primero recientemente contratado, en la pavimentación de las vías departamentales.
Dentro del documento la “agenda de propuestas del departamento del Cesar para el Plan Nacional de Desarrollo”, recientemente publicado por la Cámara de Comercio, fruto de 10 eventos de concertación, se identificó acertadamente la necesidad de la “construcción de la doble calzada San Roque – Valledupar”; todo esfuerzo por acercar sur y norte del Cesar con esta vía nacional, es urgente y prioritario.
Ya cubiertas por la Ruta del Sol 3 las conexiones al Magdalena y Bolívar, proponemos desde EL PILÓN la urgente necesidad de construir por la Nación la doble calzada de Valledupar a Cuestecitas, apenas 125 kilómetros, a cargo del INVIAS. Una fase inmediata inicial debe ser hasta San Juan. Esa es una vía fundamental para El Cesar y su relación con el turismo de la alta Guajira y el prometido mercado venezolano.