Un video de cámara de seguridad y varios testigos sirvieron como pruebas a la Fiscalía para presentar ante un juez de control de garantías a dos sujetos como los delincuentes que, presuntamente, acabaron con la vida de la adolescente Yiseth Paola Rodríguez, en medio de un hurto sucedido el pasado 8 de diciembre en el municipio de Agustín Codazzi.
Estos son Jaider Enrique Jiménez Cantillo y Luis Miguel Zarate Garzón, imputados por los delitos de homicidio agravado y hurto calificado agravado en calidad de tentativa en una audiencia desarrollada la tarde de este viernes.
Ninguno aceptó los cargos. Sin embargo, en contra tienen los testimonios de los familiares de la adolescente de 15 años, quienes reconocieron mediante álbumes fotográficos a los señalados delincuentes, además de un video de una cámara de seguridad del sector y los informes de campo de los investigadores de policía judicial.
Es así que la Fiscalía concluyó que Luis Miguel Zarate Garzón y Jaider Enrique Jiménez Cantillo eran el conductor y parrillero, respectivamente, de la motocicleta que arribó a la casa de la menor, ubicada en el barrio Buenos Aires, para cometer un hurto.
“Ella (la menor) al ver que Jaider se dirige hacia la puerta de su casa, tira el celular al interior de la vivienda y Jaider al notar que la menor corre se abalanza contra ella, la sujeta y le propina tres puñaladas; una vez hace esto, sale corriendo y se monta en la moto que era conducida por Luis Miguel Zarate”, relató el representante del ente acusador.
Precisó, también, que los hombres emprendieron la huida en compañía de una mujer que todavía no han identificado, mientras que Yiseth Paola Rodríguez fue socorrida por su papá y trasladada al hospital de Codazzi.
De ahí fue remitida a la Clínica Laura Daniela, de Valledupar, donde falleció a causa de las heridas que sufrió en la espalda y debajo del busto del lado izquierdo.
La muerte de la adolescente despertó indignación entre la población del departamento del Cesar, puesto que murió cuando intentaba compartir con su familia la tradición de prender las velitas y al día siguiente se iba a graduar como bachiller.
La Fiscalía pidió que los sujetos fueran cobijados con medida de aseguramiento en centro carcelario, pero hasta el cierre de esta edición el juez no se pronunciaba sobre la petición.