Desespero, angustia, desilusión e incertidumbre son los sentimientos que desde hace más de 3 años sienten los habitantes de la urbanización Nando Marín, en la manzana ‘La primera piedra’, debido al mal estado en que se encuentra la piscina comunal de niños y adultos, la cual está llena de larva, zancudos, basura y maleza en general.
Según contaron los habitantes del sector, hace 7 años la Constructora M&S hizo la piscina y hace un poco más de 3 años fue entregada a la administración municipal. Sin embargo, hasta la fecha no ha sido cedida a los residentes del conjunto para que estos se encarguen del mantenimiento. “Los líderes de Nando Marín le exigimos al alcalde hacer entrega de la piscina al administrador general, ya que cuando la constructora la entregó al municipio, los conjuntos no estaban constituidos legalmente como propiedad horizontal, pero hoy en día sí.
“Queremos que el municipio la arregle, la entregue en óptimas condiciones y nosotros nos encargaremos de mantenerla. Queremos ponerla a funcionar”, acotó Daniris Navarro, presidenta del Consejo Directivo de la manzana ‘La primera piedra’.
Además, agregó que el municipio no ha realizado limpiezas en ese espacio y que por este motivo existe proliferación de mosquitos causantes de dengue, olores exuberantes, agua de mal color y demás; por lo que se convierte en foco de contaminación y, por ende, una emergencia de salubridad que los afecta directamente.
Según informaron, el caso ha sido denunciado a través de redes sociales y derechos de petición, no obstante, sus esfuerzos parecen ser en vano, ya que el burgomaestre encargado no ha buscado soluciones para esta problemática. “Ya le hemos solicitado a la Secretaría de Salud local, pero ellos nos han visitado y no hemos visto resultados de nuestras gestiones, por eso acudimos a los medios de comunicación”.
¿DESPUÉS DE ENTREGARSE QUÉ PASARÁ?
Navarro aseveró que al hacerse entrega de la piscina a los administradores de la urbanización, podrían ‘recuperar’ el espacio, es decir, lo convertirían en un centro recreacional y se generaría empleo: “Nosotros nos organizamos para dar $2.000 por apartamento y somos 2.000 apartamentos, por lo que tendríamos $4.000.000 y con eso arrancaría la administración, más las actividades que podamos hacer aquí. Al estar funcionando la piscina cobraríamos para ingresar y con eso compraremos lo que se necesita para el mantenimiento. Aquí se generaría empleo, porque necesitaríamos 3 celadores, un piscinista y un salvavidas, los cuales serán de los mismos conjuntos”.
Por otra parte, la salubridad no es el único problema que se desencadena de la ausencia del municipio en esta parte de la ciudad, debido a que al estar inhabilitada, los baños y vestier de la piscina se convirtieron en una guarida para la delincuencia y los jóvenes consumidores de sustancias alucinógenas. César Luna, habitante del sector expresó: “La delincuencia se ha tomado esta parte, ya hemos soldado las rejas pero ellos la vuelven a dañar para entrar. No queremos que esto se convierta en una guarida, queremos recuperar el espacio”.
Tras estar sola y abandonada esta área de Nando Marín, la maleza y basura se apoderan de ella, convirtiéndose en un escenario propicio para situaciones de riesgo, tales como un incendio, los cuales ya se han presentado. “Los muchachos entran aquí y tiran las colillas de cigarrillos y eso coje candela”, expresaron los habitantes. EL PILÓN pudo observar que en el lugar hay registros de fuego y los ‘palos’ de mango sufrieron por ello.
Por tanto, al existir tantos jóvenes “perdidos en los malos caminos”, los habitantes aseguran que al funcionar la piscina correctamente, estas personas podrían vincularse a la natación. “Podríamos crear competencias, la idea es poder darle uso a este patrimonio que tenemos y no verla cada día deteriorarse más. Qué tal que de aquí salga un olímpico”, sostuvieron.
Sin embargo, mientras el mandatario hace entrega de la obra a los habitantes, estos seguirán viendo cómo este patrimonio se deteriora día a día sin poder darle uso. Matthias Moreno, de 10 años de edad concluyó diciendo: “Todos quisiéramos que estuviera limpia para poder bañarnos, así ya no tendríamos que ir a otras partes, ya que tenemos una piscina acá en nuestro conjunto y otros niños también se podrían venir a bañar. Al alcalde le pido que venga a arreglarnos la piscina, a él no le afecta porque no vive acá, pero a nosotros sí”.
Ketty Gutiérrez Maestre/EL PILÓN