Las pestañas postizas se han convertido en una opción infaltable para las mujeres que quieren hacer más llamativa y estética su mirada, por esto es cada vez más normal que muchas de ellas opten por usarlas en su día a día.
Esta opción ha representado una alternativa para quienes estaban inconformes con la apariencia natural de sus pestañas y dentro de los procedimientos existe un amplio abanico de posibilidades.
Entre estos se encuentran: las pestañas en tira que tienen una duración de uno o dos días, las pestañas punto a punto que demoran de ocho a quince días y las ‘pelo a pelo’ que se colocan bello por bello y demoran aproximadamente seis meses dependiendo de como sea el mantenimiento, que debe hacerse cada quince o veinte días y en el cual se repone la cantidad que se haya perdido.
Además, según la esteticista Liseth de Ávila, otro procedimiento relacionado con esta tendencia es el lifting de pestañas, el cual se hace con las pestañas naturales de la persona que debe tener una cantidad prudente para que pueda ver un buen resultado. En dicho procedimiento que tarda en promedio una hora de realización, se utilizan unos productos especiales que deben contar con la autorización legal y se logra dar volumen y grosor a las pestañas naturales.
El resultado de este proceso que no es invasivo, puede durar de uno a dos meses y también se lo pueden realizar los hombres con lo que se demuestra que la tendencia de pestañas no se limita solamente al género femenino.
En relación al lifting, De Ávila aclara que aunque este y los demás procedimientos no son de riesgo, es posible que la persona haga alergia a alguno de los productos empleados, por eso antes se hace una prueba en la mano para descartar cualquier riesgo.
Los precios de estas aplicaciones de pestañas varían de acuerdo al procedimiento que se realice y se encuentran oscilan entre los $15.000 y los $130.000, mientras que el valor del mantenimiento periódico es proporcional al porcentaje que la persona haya perdido.
En relación a los cuidados, que son muy importantes para que las pestañas duren más, la esteticista recomienda que se evite el chorro de agua directo hacia las pestañas, limpiarse con paños húmedos, no utilizar productos con aceite y aunque asegura que el calor no tiene ningún efecto porque la aplicación se hace con un pegante, se debe evitar la exposición extrema a vapores y saunas muy calientes.
Estas extensiones no representan un daño para la pestaña natural y según el concepto médico no tienen ninguna contra indicación seria, salvo alguna irritación por los pegantes que utilizan y que se dan en casos particulares.
Además estas pestañas pueden ser maquilladas de la misma manera que las naturales, aunque al tener una apariencia más fuerte representan una preocupación menos en ese sentido. De esta forma las mujeres tienen una alternativa en su maquillaje, puesto que en el día a día pueden verse más arregladas sin hacer un esfuerzo muy grande en su apariencia.
Daniela Rincones Julio/ EL PILÓN
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