Recibí un aguinaldo anticipado de mi hermano en la fe de Cristo, el gran Miguel Ángel Gutiérrez, diputado que ejerce con éxito y equidad su nobel posición en la duma departamental, quien está dichoso y pasando un bello diciembre junto a su esposa Yaissy, debido al regalo que el Niño Dios les envío, su primogénita, mi sobrina la princesa Valentina.
Migue me regaló un perrito de la raza Rhodesian Ridgeback o Crestado Rodesiano, porque tiene como característica una cresta sobre su espina dorsal, formada por pelos que crecen en sentido contrario al resto del pelaje, además es conocido como el cazador de leones, uso que le dan en África, su continente de origen, inicialmente lo “bauticé” con el sugestivo nombre de Comandante, no por hacerle alegoría a ningún grupo alzado en armas, sino debido al nombre de quien me lo regaló, tocayo del Arcángel que comanda los ejércitos celestiales, representado en una sugestiva imagen, espada en mano pisándole la cabeza al demonio.
Debido a que comenzaron a relacionar el nombre de mi mascota con los comandantes de la Farc y con Fidel Castro decidí cambiarle el nombre por Víctor. Definitivamente el perro es el mejor amigo del hombre, hay varios famosos por su fidelidad con sus amos, como Greyfriars Bobb, de la raza Skye Terrier que se hizo conocido en Edimburgo en el siglo XIX por permanecer junto a la tumba de su dueño por 14 años, John Gray, hasta su muerte el 14 de enero de 1872, casi inmediatamente después de la muerte del perro, el escultor William Brodie creó una estatua de Bobby a tamaño real.
Hachiko fue un perro japonés de raza akita, recordado por su lealtad a su amo, el profesor Hidesamuro Ueno, Hachiko a principios de 1924, fue regalado al profesor del Departamento de Agricultura en la Universidad de Tokio. Este perrito acompañaba a su amo a la estación para despedirse allí todos los días cuando su dueño se iba al trabajo y al final del día volvía a la estación a recibirlo. Hasta que el 21 de mayo de 1925 el profesor Ueno sufrió un paro cardiaco y murió. Esa tarde Hachiko corrió a la estación a esperar la llegada del tren de su amo, y no volvió esa noche a su casa.
Se quedó a vivir en el mismo sitio frente a la estación durante los siguientes 9 años de su vida. El 8 de marzo de 1935, Hachiko fue encontrado muerto frente a la estación de Shibuya, tras esperar infructuosamente a su amo durante nueve años.
A nivel local hay una historia asombrosa en torno a la muerte de Diomedes, cuentan que un perrito de la raza Pincher que tuvo como ultima mascota, la noche previa a su muerte y cuando iba camino a Barranquilla a su última presentación, el perrito se montó en la camioneta y se escondió, cuando iban saliendo de Valledupar salió de su escondite, lo cual pareció un acto premonitorio, como si no quisiera desprenderse de su amo presintiendo su muerte.
Bolívar tuvo un famoso caballo llamado Palomo, el de Alejandro Magno se llamaba Bucéfalo, el de Napoleón Marengo, Michael Jackson tuvo un chimpancé llamado Bubbles, Pacheco el popular animador de televisión tuvo un perro al que quiso tanto como a un hijo, llamado Fantomas, Laika, Lassie, Chita y Flipper son otros animales célebres.
COLETILLA: ¿Qué pensarán los detractores de Jorge Oñate, con respecto a este nuevo y excepcional trabajo? Lo vaticiné hace 15 días, se agotaron los compactos antes de finalizar el día de su lanzamiento y ya está siendo considerada la producción del año, felicitaciones al Maestro y a toda su familia.