Un estudio del Departamento Nacional de Planeación, determinó que Pelaya, Cesar, es el municipio del departamento en el que los niños, niñas y adolescentes tienen las mayores probabilidades de caer en el trabajo infantil.
En Pelaya la posibilidad que un niño trabaje es de 6,8, según el Índice de probabilidad de trabajo infantil, IPTI, que califica de 1 a 10, el riesgo de trabajar para niños y jóvenes entre los 5 y 17 años.
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Esta medición, aseguran las autoridades, “les permitirá a los nuevos alcaldes y gobernadores fortalecer las políticas de prevención, ya que identifica a departamentos y municipios e incluso personas con mayores riesgos de incurrir en este fenómeno”.
El segundo municipio del Cesar con mayor riesgo de trabajo infantil es San Martín, con una calificación de 6,7 sobre 10. Luego están El Copey (5,4) y Valledupar (5,1). Al contrario, El Paso (2,5) y Tamalameque (3,4) tienen menores riesgos, según la calificación.
De acuerdo con el modelo, los mayores riesgos de trabajo infantil se presentan en hogares donde el jefe de hogar está ocupado en el sector informal. En estos casos se incrementa el riesgo en 3,1 puntos porcentuales con respecto a los que tienen trabajo formal. Cuando el jefe del hogar se encuentra desempleado o desocupado, el riesgo de trabajo infantil aumenta 1.6 puntos porcentuales frente a los que no lo están.
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En el país más de 600.000 niños se dedican al trabajo infantil. A nivel nacional, en los departamentos de Santander, Tolima y Nariño se presentan las mayores probabilidades de que la población entre 5 y 17 años haga parte de los niños, niñas y adolescentes dedicados al trabajo infantil en Colombia. Mientras que el Cesar se ubica en los departamentos con menores riesgos, junto a Atlántico, Bogotá, Boyacá, Caldas, Cauca y Cundinamarca.