Con el pasar de los días la comunidad del barrio Don Alberto reclama, con más razones, la celeridad que requieren las obras de pavimentación de la carrera 41, en la entrada principal a este otros sectores de occidente de Valledupar.
Ya han transcurrido más de cuatro meses de retrasos en la obra que se pensaba iba a tardar 35 días y por eso el malestar e inconformismo de la gente que diario utilizan esta importante arteria vial.
Las obras comprenden la pavimentación de dos mil metros cuadrados, además de darle solución a la problemática de redes húmedas y alcantarillado pluvial que se presenta en el sector con un valor cercano los 700 millones de pesos, financiados por la Gobernación del Cesar y la Alcaldía de Valledupar.
Sin embargo, el panorama que se presenta en el lugar es de total caos y traumatismo vehicular porque los conductores no tienen por donde circular a pesar de hay un tramo arreglado. En la entrada a Don Alberto hay unas barricadas hechas con tierra, piedras que impiden el normal tráfico de carros y motos. Ante este impedimento a los conductores del sector que necesitan acortar distancias se las han ingeniado para pasar por encima de la tierra.
“Aquí a uno le toca poner en peligro su vida con tal de pasar de un lado a otro porque necesitamos la carretera para movilizarnos. Estamos cansados de ver esos obstáculos en la vía, nosotros queremos verla despejada y en buenas condiciones para transitar”, dijo Julio Mejía, un motociclista que utiliza la vía más de cuatro veces al día.
Quejas como estas son frecuentes y más aún con la llegada de la ola invernal porque cada vez que llueve se inunda el sector.
Inngry Jácome Serrano/ El Pilón