La obra del acueducto regional de los corregimientos del norte Guaccoche, Guacochito, Alto de la Vuelta y Las Raíces representa para los habitantes de esta zona del municipio de Valledupar una gran esperanza de finalmente tener la solución en sus casas para contar con agua potable.
A pesar de que en el mes de marzo EL PILÓN registró que el proyecto ya completaba un 70 % de avance en los trabajos de acuerdo con lo que explicó Juan Pablo Morón Riveira, secretario de Obras Públicas del municipio para entonces, el proyecto en la actualidad se encuentra detenido.
De acuerdo con lo que explicó David Romero, habitante del corregimiento de Guacochito, las comunidad se encuentran bastante preocupada por el estado de la obra ya que durante años han esperado que se lleve a cabo un proyecto de este tipo y temen porque ahora que ya estaba en camino de convertirse en una realidad, no se concluya de forma óptima.
“Esa es la esperanza. No es solamente Guacochito, la protesta es de los cuatro corregimientos porque nosotros permanentemente vivimos dialogando y pensando en cómo vamos a seguir”, expresó este líder comunitario.
Entre tanto explicó que para contar con el servicio de agua potable tienen que comprar el líquido a un carro tanque que en ocasiones llega al corregimiento y lo que les representa dos mil pesos diariamente para acceder a una caneca. Sumado a eso dan una bonificación de otros dos mil pesos para contar con el líquido para uso doméstico.
Sobre esta denuncia, el actual secretario de Obras Públicas del municipio, Jorge Maestre, indicó: “El acueducto regional del norte presenta hoy un inconveniente y es que estamos haciendo todos los trámites para la imposición de la servidumbre, que es de alrededor de 200 metros lineales de tubería sobre un predio de la familia Molina Araújo”.
En este sentido, explicó que están haciendo la negociación en aras de realizar una enajenación voluntaria y que si eso llegase a fracasar tendrán que hacer todas las acciones para adquirir un predio por motivo de utilidad pública “o más bien poner la servidumbre y debemos consignar el dinero”, sostuvo el funcionario.
Esto quiere decir que en estos momentos para darle celeridad al proyecto están desarrollando el avalúo del predio sobre el cual se tasaría el pago de esa servidumbre, y una vez tengan el valor de ese avalúo procederán con la imposición de la servidumbre para poder realizar el tendido de la línea de conducción, “entonces en esa etapa se encuentra el proyecto del acueducto regional del norte”, agregó el funcionario.
En cuanto a la duración de todo este proceso, Maestre sostuvo que tienen planeado que al finalizar este mes ya tenga resuelto ese tema y que una vez hecho el tema de la servidumbre puedan entonces proceder a realizar el tendido de las redes de aducción y conducción.
“Además decirle a la comunidad que el objeto del contrato fue ampliado para que se puedan llevar a cabo las obras tanto de la línea de conducción que transporta el agua como las redes de los corregimientos que serán beneficiados con esta importante obra”, puntualizó el secretario.
En Guacochito se encuentran más de 1.000 habitantes como hizo referencia Romero. Allí durante todo este tiempo ha sentido la falta de obras que impacten considerablemente en la calidad de vida de los residentes puesto que son muchas las falencias que presentan para contar con servicios eficientes.
A la par, reconoció Romero, el tema del acueducto ha sido durante varios años una de las promesas de los candidatos políticos y todavía no han podido ver nada hecho realidad.
¿Y EL PUENTE?
Otra obra que ha asumido la administración local debido a las necesidades de las comunidades es la del puente de Las Raíces. En este sentido el secretario de Obras Públicas del municipio se refirió a que es un proyecto que tiene como objeto solucionar un problema histórico que presentan tanto el corregimiento de Las Raíces como El Alto de la Vuelta, donde cada vez que llueve un brazo del río impide la accesibilidad a estas zonas. “Ya se instaló un puente militar que recibimos de Invías, donde nosotros construimos los soportes, los estribos, todo, y se puso en funcionamiento”, sostuvo.
De la misma manera hizo énfasis en que falta otro que donó la multinacional Drummond: “Pero ese como comenté el principal inconveniente que tiene es que sale más costoso traerlo, desmontarlo y volverlo a montar, que traer uno en el sitio, uno nuevo, entonces la decisión que estamos tomando con la interventoría, una vez tengamos el aval de esos diseños, es iniciar la construcción de ese puente y así quedaría resuelto el problema histórico que tienen estos corregimientos cada vez que el río presenta estas crecientes”.
Precisamente, dijo Maestre, estas obras se encuentran paralizadas porque están revisando los diseños del puente y están esperando obtener el aval para poder retomar los trabajos. “Así mismo vamos a tener una estructura nueva, ya no va a ser un puente usado sino una estructura nueva y a un precio más económico que el desmonte, transporte y armado del mismo. Haciendo ese análisis financiero eso fue lo que nos arrojó”, argumentó Maestre.
Seguidamente recordó a la comunidad que puede estar tranquila porque la obra no va a quedar inconclusa. Esto porque las bases donde se va a soportar el puente están construidas, lo que les permite que no tengan ningún tipo de temor por el tema de las lluvias debido a que el trabajo ya se hizo.
Por último, agradeció la donación que hiciera la empresa minera Drummomd en su momento, pero reconoció que tras la evaluación financiera para este proceso están tomando una decisión más responsable en cuanto al ahorro de recursos. “No estuve ni hice parte de la etapa precontractual de este proyecto, pero el mensaje es el mismo. La obra se va a ejecutar y se va a terminar en esta administración y reiniciaremos obras una vez aprueben los diseños”, finalizó Maestre.
Por: Daniela Rincones Julio / EL PILÓN
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