La Gran Encuesta Integrada de Hogares que realiza el Dane, muestra que “la tasa de trabajo infantil en el periodo octubre-diciembre de 2017 (7,3%) fue la más baja en los últimos seis años desde que hay cifras comprables (2012)”.
Además asegura que “en el trimestre octubre-diciembre de 2017 la tasa de trabajo infantil de niños y adolescentes (de 5 a 17 años) fue 9,0 %, la tasa de niñas y adolescentes (de 5 a 17 años) fue 5,4 % y en el mismo periodo de 2016 estas tasas fueron 10,2 % y 5,1 %, respectivamente”.
En la última semana del mes de marzo, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar reforzó la campaña ‘Presente contra el trabajo infantil’ e hizo un llamado a las autoridades municipales y departamentales para que intensifiquen las acciones que faciliten la identificando de actividades relacionadas con trabajo infantil. Solo en un mes de campaña identificaron 1.800 casos en todo el país.
En el departamento del Cesar, donde según el Icbf existen cerca de 39 casos identificados de niños que trabajan, la explotación infantil como mano de obra es una realidad más cruda. En febrero pasado, EL PILÓN publicó un informe que daba cuenta de que por lo menos 2.853 menores de edad ejercen el trabajo infantil en el departamento del Cesar, según cifras reveladas por el Sistema de Información Integrado para la Identificación, Registro y Caracterización del Trabajo Infantil, SIRITI. De esa cifra, caracterizada por niños entre 5 y 17 años, San Diego es el municipio en donde más abunda esta situación con 1.003 casos presentados hasta la fecha, mientras que Aguachica con 366 menores es la segunda población en el Cesar con alto índice de niños en estado laboral. Valledupar tiene 31.
El trabajo infantil es una realidad, solo en los semáforos se observan menores vendiendo productos para ganarse el sustento diario, muchas veces explotados por adultos avivatos que hacen de esto un negocio.
Hoy retomamos el llamado que hizo el Icbf a los mandatarios municipales y departamentales, para que atiendan este problema social. Los niños no deben estar en la calle trabajando, deben estar en un salón de clases, estudiando. Cualquier ciudadano puede denunciar o poner en conocimiento de las autoridades los casos de trabajo infantil o situaciones en las que se vulneren sus derechos.