Saúl Barbosa Molina, natural de Río de Oro, es otro de los cesarenses que aparecieron baleados y sin vida en el corregimiento de Palmerito, jurisdicción de Cúcuta, Norte de Santander.
Su cuerpo, según reportó el diario La Opinión, fue reconocido por sus familiares que se negaron a dar declaraciones a la prensa regional.
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Entre tanto, el cadáver del otro cesarense asesinado, Yerry Guillén Hernández, natural de Chimichagua, fue trasladado hasta el corregimiento de Saloa para las honras fúnebres.
Henry Guillén manifestó que llegó con los restos de su hijo a las cuatro de la mañana de este jueves y a las 10:00 fue sepultado en el campo santo de la localidad tras realizarse una ceremonia religiosa.
El joven de 21 años residía en ese lugar junto con la familia pero hace dos semanas se marchó sin avisar.
Saúl Barbosa Molina y Yerry Guillén fueron encontrados junto con seis cuerpos más por los habitantes del lugar. Hasta ahora los otros identificados son Víctor Manuel Masson González, Gustavo Mosquera Moreno, Pedro Nel Paternina Díaz y Saúl Barbosa Molina, otros dos faltan por identificar.
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Según las autoridades, los hombres fueron ultimados a bala en el sector de Boca de Grita en Venezuela y arrojados en el territorio colombiano, en zona fronteriza.
Las primeras hipótesis apuntan a que sus muertes se produjeron por un enfrentamiento de grupos insurgentes en la zona en donde estarían delinquiendo Los Pelusos, el ELN y disidencias del EPL.