¿Sabías que el lugar donde vives pude ser un factor de riesgo cuando la calor azota?
Estudios realizados por el Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental de Barcelona, España, revelaron que el residir en las zonas menos verdes de las ciudades, entre edificaciones antiguas y pocas áreas de sesión hace de ellos los principales factores de riesgo de fallecer durante una ola de calor.
Los investigadores llegaron a esta conclusión luego de que analizaran las características socioeconómicas y urbanas del área metropolitana de Barcelona y la distribución geográfica de más de 50 mil muertes causadas en las temporadas de calor entre 1999 y 2006. También estudiaron las características socioeconómicas y urbanas de ocho sectores de la ciudad.
Al combinar los datos comprobaron que no solo los factores urbanos como la ausencia de zonas verdes cercanas a las viviendas afectaban a la mortalidad, sino que el riesgo se multiplicaba por dos en barrios habitados por trabajadores manuales, con edificios viejos y pocos jardines.
Entre las ocho variables sociodemográficas escogidas, cinco no mostraron relación significativa con el número de muertes producidas por el calor.
Estos factores son el porcentaje de vecinos desempleados, de jóvenes con bajo nivel educativo, de mayores de 65 años y de casas sin aire acondicionado.
Los autores sugieren que las áreas con construcciones más antiguas pueden albergar más riesgo debido al aislamiento térmico de los edificios, y que la sorprendente falta de relación con la edad de la población podría ser reflejo de que 64 años es una edad de corte demasiado baja para notar el efecto.
Uno de los investigadores del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental de Barcelona, Xavier Basagaña, sugirió que las áreas con construcciones más antiguas pueden generar más riesgo por el aislamiento térmico.