El distinguido escritor y docente titular, pensionado de la Universidad Popular del Cesar, Luis Zabaleta Cabrales, todavía a sus 86 años camina en las mañanas por el parque Los Cortijos. Con su carisma y ejemplo de disciplina y vocación literaria nos presenta su noveno libro ‘Autobiografía histórica de un docente universitario’, editado por Gráficas del Comercio.
El libro inicia en Mompox (resalta el nombre Santa Cruz de Mompox), distrito en el departamento de Bolívar. Declarado Monumento Nacional en 1959 y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1995. Ahí nace el 9 de julio de 1939, es el tercero de nueve hermanos; en un hogar humilde y religioso. Su padre muere a temprana edad, y con su madre se traslada a El Banco, donde ella fallece, él apenas tenía 15 años; le toca dedicarse a diversos trabajos: lustrador de zapatos, voceador de periódicos, albañil, plomero, electricistas; después pintor comercial y caricaturista, que le generaba su manutención y asimismo el reconocimiento en el pueblo.
Su primer trabajo formal fue de portero de cine; cuando empezaba la película se iba donde el operador a ver el mecanismo de la máquina proyectora y aprendió fácil el manejo del equipo. Ese trabajo despertó su afición por el cine y le facilitó el desarrollo del lenguaje, la conversación y el baile (fue experto bailador de boleros, corridos, rancheras, rumbas y mambos). Y comenta: “La cultura cinematográfica influyó en mi proceso de socialización, y echó los cimientos de mi personalidad”.
Fue un autodidacta con talento natural para las caricaturas. Huérfano, y obligado a trabajar desde su niñez, no tuvo oportunidad de asistir a la escuela. Un joven amigo, Mattos Pinedo, comerciante de origen santandereano, fue su ‘estrella de Belén’: le aconseja estudiar y le brinda apoyo económico. En 1960, gracias a las orientaciones del profesor Rafael Camelo, coordinador del colegio de bachillerato de El Banco (Magdalena), inicia el ciclo de bachiller a los 21 años. Cuando terminó el grado cuarto, su afán era conseguir empleo. Al senador Trino Luna Morón, su amigo y protector, le comenta esa intención, y este le dice: “Zabaleta, ¡dejé de ser pendejo!, continúe sus estudios hasta que se haga bachiller. Si se retira no ha logrado nada y su pobreza será la misma”.
En 1967 termina el bachillerato. En la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Tunja estudia licenciatura en Psicopedagogía (1968-1971). En 1972 empieza su experiencia docente en La Normal de Señoritas de Mompox; en 1973 en la Escuela Normal de San Juan del Cesar (La Guajira), y en 1976 en el colegio Roque de Alba, de Villanueva. Su vinculación en la Universidad Popular del Cesar fue en agosto de 1977; ingresa como coordinador del programa de Matemáticas y Física; luego fue rector encargado y después profesor titular de la cátedra de Educación, Pedagogía y Didáctica, durante 40 años. Entre sus libros publicados: ‘Cómo asumir el papel del maestro’ (1996), ‘Estrategias para promover una cultura de aprendizaje autónomo’ (2004), ‘Los 30 años de la Universidad Popular del Cesar’ (2006), ‘Mompox, una joya de la arquitectura colonial (2020).
Por José Atuesta Mindiola