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Entró a regir el nuevo Código de Policía, ¿estamos preparados?

El ruido, consumir alcohol en espacios públicos y no lavar los vehículos en la vía, son algunas normas de convivencia que tendrán que acoger los colombianos con la implementación del nuevo Código Nacional de Policía, que entra en vigencia a partir de hoy 30 de enero en todo el país.

De esta manera, las autoridades buscan garantizar el ejercicio de los derechos y el cumplimiento de los deberes de las personas, con el fin de asegurar las condiciones necesarias para la buena convivencia.

Este Código fue modificado, teniendo en cuenta que el anterior data de 1970 y que las conductas y los comportamientos ciudadanos se han ido transformando por los mismos avances, entre esos, tecnológicos, transporte masivo, cambios en la protesta social, entre otras.

El coronel Mauricio Bonilla Méndez, subcomandante de la Policía en el Cesar, dijo a EL PILÓN que el fin superior de este nuevo Código Nacional de Policía es precisamente la convivencia.

“Hay unos principios fundamentales y es que este Código tiende a proteger la vida, el respeto a los derechos humanos, la prevalencia de los derechos de los menores, la igualdad, la autorregulación. Esto es muy importante y busca que los derechos de uno no vulneren y sobrepasen los derechos de los demás”, expresó Bonilla Méndez.

El Código de Policía adopta en medio de una polémica nacional por dudas sobre su aplicación, ya que esta institución recibe facultades que tienen los policías para ingresar a domicilios, sin orden escrita en circunstancias específicas, en casos de imperiosa necesidad.

Lo que más se podría incumplir en Valledupar

Según las primeras búsquedas de información por parte de la Policía Nacional, tratando de ver cuáles van a ser los mayores problemas en la capital del Cesar, se encuentran los relacionados con el exceso de ruido, ya sea en eventos abiertos al público, en sitios donde se expenden bebidas embriagantes o simplemente la perturbación en vecindarios o conjuntos cerrados, que generan una mala convivencia entre la comunidad.

De igual forma las riñas, también se observan encabezando este listado, así como sacar las basuras en momentos que no son adecuados porque no pasa el carro recolector. El consumo de bebidas embriagantes en algunos lugares, hecho que tiene que ser regulado por la administración municipal, pues en la región las personas son muy dadas a tomar en parques, en sitios públicos; el otro hecho, es el irrespeto a la autoridad que se presenta en gran cantidad de casos en un procedimiento; al igual que el lavado de vehículos o bienes en la vía pública que terminan con la contaminación del medio ambiente.

El coronel Mauricio Bonilla Méndez también aseguró que en el Cesar se observa mucho el utilizar inadecuadamente el servicio único de número y emergencia, esto involucra el consumo de la red de emergencia e impide que las personas que requieran el servicio puedan acceder a él. “En el último mes son más de 66.000 llamadas que han ingresado a la línea 123 y de estas solo el 10 %, son llamadas que conducen a un trabajo de Policía, a un procedimiento y esto también significa un irrespeto a la autoridad”, puntualizó.

El alto oficial aclaró que este Código es netamente preventivo, por lo que no se busca afectar al ciudadano, sino cambiar esos comportamientos que día a día se van convirtiendo en una costumbre, inclusive heredada a los niños que ven que los adultos se comportan de una manera y creen que es la adecuada.

“Esto quiere decir que lo primero que se debe realizar durante un procedimiento es respetar el debido proceso que tiene ver con que el Policía debe acercarse al ciudadano que está cometiendo la falta y explicarle que este es un comportamiento que está alejado de una buena convivencia pacífica y que esto debe cambiar. Pero muchas personas no quieren aceptar su responsabilidad”, expresó Bonilla Méndez.

Garantías de cumplimiento y pago de multas

Según las autoridades, el procedimiento inicial es muy conciliatorio pues se busca que la persona solamente cambie el comportamiento y de una manera discrecional el oficial de policía simplemente puede determinar no continuar con el procedimiento e inclusive agradécele esa actitud al ciudadano.

Pero si la persona considera que no tiene responsabilidad sencillamente se le aplica el comparendo, y será el inspector de policía quien determine si ratifica o revoca la medida. De ser ratificada ordena el registro de ese comportamiento contrario a la convivencia en el sistema registro de medidas correctivas donde permanecerá por un año para verificar si es reincidente o no.

La persona puede acercarse a una cuenta que hace parte de un convenio realizado con el municipio, y cancelar la multa. El infractor puede solicitar un descuento a cambio de una actividad pedagógica o comunitaria, “esto demuestra que el código lo que busca en vez de afectar el bolsillo del ciudadano es cambiar estos comportamientos”, dijo Bonilla.

Estos dineros van a ser empleados el ciento por ciento con una destinación específica de la administración municipal para seguir impulsando el Código Nacional de Policía y la sana convivencia.

Comité de socialización

A través de un trabajo articulado entre la Alcaldía de Valledupar, el personero Municipal, Alfonso Campo Martínez y el comandante de Estación de Policía Valledupar, capitán Cristian Adolfo Velázquez Rivera, la capital del Cesar avanzará en la socialización e implementación del nuevo Código de Policía, que comenzó a regir desde hoy a nivel nacional.

El seguimiento se llevará a cabo a través del Comité Civil de Convivencia, que ya fue creado y que tiene como objetivo mejorar la función y actividad de la Policía. “Este Comité tiene como objetivo ser garantes, acompañar a la ciudadanía, a quien le estamos diciendo que entrará en vigencia un nuevo Código de Policía con unas disposiciones normativas importantes, reglas mínimas que hay que acatar”, dijo el alcalde Augusto Ramírez Uhía.

De igual manera solicitó a los habitantes de la ciudad contribuir con su buen comportamiento a los estándares de vida en sociedad. Que los dueños de las mascotas sean responsables con las mismas, que los ciudadanos respeten el espacio público, los decibeles, y todos esos lineamientos establecidos en la nueva norma, que indica que el Comité deberá reunirse, al menos, una vez al mes.

Por su parte, el personero Alfonso Campo Martínez, mencionó que esta será una responsabilidad tripartida, un trabajo que debe ir de la mano de la ciudadanía para que se entre a respetar a las autoridades y asimismo a la ciudadanía.

Mientras tanto, el coronel Mauricio Bonilla Méndez, aseguró que la Policía Nacional lleva varios meses haciendo capacitación en los barrios, reuniones con presidentes de las Juntas de Acción Comunal y acordando algunas jornadas para que la comunidad escuche y participen activamente para que salgan de dudas.

“Lo que queremos es que el buen comportamiento vaya creciendo y sabemos que a medida que la gente vaya viendo que las personas en ciertos lugares se comportan de alguna manera, los de alrededor van a entender”, acotó.

De esta manera, las autoridades hacen un llamado a la comunidad para que entiendan que la paz se logra con una sana convivencia. “No podemos emplear nuestros derechos para pisotear los de otros, sino que tenemos que tener unos límites para que en nuestras comunidades, para que nuestros hijos aprendan del ejemplo”, afirmó Bonilla.

Reconoció además que seguramente va a ser muy difícil, y se va avanzar a pasos muy lentos, para que la comunidad no sienta un choque contra la fuerza pública y el Estado. “Cada actividad que se realice va a tratar de ser muy socializada. Nosotros seremos los garantes de que cada comunidad tenga el pleno beneficio de sus derecho y libertades sin irrespetar a las demás personas, cada vez que cada uno cambia nuestro comportamiento el beneficio se va a ver reflejado en la sociedad”, finalizó.

El punto de las multas está contenido en el artículo 180 de la Ley 1801 de 2016 el cual especifica que existen dos tipos, las generales y las especiales. Serán cobradas acorde al salario mínimo diario legal vigente.

Este código fue modificado, teniendo en cuenta que el anterior data de 1970 y que las conductas y los comportamientos ciudadanos se han ido transformando.

Las sanciones monetarias que establece el nuevo Código de Policía van desde los $98.360 hasta los $786.880 si son generales; en caso de las especiales, impuestas a colectivos o por infracciones urbanísticas se determinarán por la cantidad de personas o el estrato, según sea el caso.

Las multas generales: se dividen en cuatro categorías.

Multa Tipo 1: Tiene un costo aproximado de $ 98.360 (4 salarios mínimos diarios legales)

– Manifestaciones de afecto y cariño que no configuren actos sexuales.
– Utilizar indebidamente los sistemas de emergencia.
– No recoger el excremento de su mascota o después de recogidos dejarlos abandonados en espacio público.
– Obstruir la ciclo ruta.
– Ingresar y salir de las estaciones de transporte público masivo por sitios distintos a las puertas destinadas para el efecto.

Multa Tipo 2: tiene un costo aproximado de $196.720 (8 salarios mínimos diarios legales)
– Incurrir en confrontaciones violentas que puedan derivar en agresiones físicas.
– Amenazar con causar daño físico a personas por cualquier medio.
– Portar armas, elementos cortantes, punzantes o sustancias peligrosas en áreas comunes.
– Irrespetar a las autoridades de Policía.

Multa Tipo 3: Tiene un costo aproximado de $393.440 (16 salarios mínimos diarios legales vigentes)
– Agredir físicamente a personas por cualquier medio.
– Perturbar al vecindario por altos ruidos, fiestas, reuniones cuando afecten la tranquilidad de las personas.
– Realizar en espacio público actos sexuales o de exhibicionismo.
– Consumir bebidas alcohólicas o drogas dentro de centro educativo o espacio público.
– Tener animales silvestres en calidad de mascotas.

Multa Tipo 4: tiene un costo aproximado de $786.880 (32 SMDLV)
– Arrojar en las redes de alcantarillado, acueducto y de aguas lluvias, cualquier escombros que obstruya el normal funcionamiento.
– Fabricar, almacenar, comercializar o distribución pólvora.
– Agresión o poner en peligro a las autoridades de policía.
– Ejercer prostitución en lugares no permitidos.
– Ejercer la prostitución por fuera de lo establecido en la normatividad vigente para los establecimientos según zonas, horarios asignados por la ley para eso.
– Entrenar ejemplares caninos para peleas como espectáculo, o agresión de personas, animales o bienes de terceros.

Las multas especiales: estas se aplicarán como medidas correctivas por:

1. Comportamientos de los organizadores de actividades que involucran aglomeraciones de público complejas entre $2.298.200 y $16.087.400.
2. Infracción urbanística. Entre $114.910 a $574.550 dependiendo del estrato en el que se encuentre el inmueble. Aumentado hasta $4.596.400 cuando se realice en bienes de uso público o en suelo de protección ambiental.
3. Contaminación visual. Desde $34.473 hasta $919.280.

Andreina Bandera/ EL PILÓN
Andreina.bandera@elpilon.com.co

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