Así como la noche de las velitas, las cenas del 24 de diciembre, los tradicionales buñuelos y los regalos de Papá Noel y el Niño Dios, la novena de aguinaldo se conserva como una tradición indeleble en los vallenatos.
Esta costumbre que inicia el martes 16 y termina el miércoles 24, de acuerdo al sacerdote Enrique Iceda, hace eco a los nueves meses de gestación del niño Jesús que nace. “De todas las novenas dentro del cristianismo la más importante es la de Navidad. En ella nos preparamos para la gran solemnidad del nacimiento de Jesús”, asegura.
Nimia Nieves de Díaz, una habitante de Valledupar que lleva más de 30 años haciendo las novenas de Navidad, manifiesta que lo hace como un homenaje a Dios, que siempre la ha respaldado y por el que siente un inmenso amor. “Esta costumbre la adquirí en la catedral donde había un internado para niñas, y de mi padre, quien me leía la Biblia en forma de cuento. Luego se la trasmití a mis hijos y ellos a mis nietos”, manifestó.
Su casa se transforma en época decembrina. Las sillas son relegadas para darle paso a un enorme pesebre construido por ella junto con su nuero Hernando Redondo y su hija Orieta Díaz, quienes convocan a los niños de la cuadra para enseñarles pasajes de la Biblia, canciones y rezo católicos.
Así como ella, decenas de personas se reúnen con sus familiares y amigos durante nueve días en torno alrededor de esta celebración que invita a reflexionar sobre la identidad y el sentido de ser cristiano.
Sus partes
Dentro de los componentes de la novena o los pasos que hay que seguir en esta novena están: oración para todos los días, oración al Niño Jesús, oración a la Santísima Virgen, oración a San José, gozos, consideración de cada día, reflexiones y los tradicionales villancicos.
Origen de las novenas
Hacia finales del siglo XVIII Fray Fernando de Jesús Larrea escribe un texto sobre la novena, que es publicado en 10 ejemplares por una imprenta de Santa Fe. Un siglo después, sería una monja llamada María Ignacia la que lo retoma, compuso los denominados “gozos” y lo difunde en la comunidad católica.
El texto tiene tal impacto, que los piadosos no dejan de asistir a las iglesias para participar de rezos y cantos.
Luego una religiosa bogotana, a finales del siglo XIX, llamada María Ignacia, cambió un poco la tradición de rezar la novena y algunas oraciones escrita por el Fray.
El pesebre
Sin duda alguna la mayor manifestación de la Navidad es el pesebre como símbolo de esta época del año. Con la Virgen María, San José, El Niño Dios, los tres reyes magos, los pastores, la mula y el buey las familias representan el nacimiento de Jesucristo en el portal de Belén.
ANNELISE BARRIGA RAMIREZ
Annelise.barriga@elpilon.com.co