El director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, Victor Muñoz, publicó en su cuenta de Twitter cómo va la vacunación contra el coronavirus a nivel nacional. Y nos rajó, sino fuera por San Andrés, estaríamos en el pésimo último lugar.
El alto funcionario indicó que a corte del 7 de marzo, a las 4:00 de la tarde, el departamento con mayor alcance en dosis aplicadas era Cundinamarca, con el 99.6 %; en una posición media está Barranquilla con el 67.5 %, mientras que en el Cesar el avance es del 42.3 %. Explicó que a este departamento el Ministerio de Salud ha entregado 9.121 dosis, de las cuales 3.859 han sido aplicadas, ubicándolo en el penúltimo puesto, seguido por San Andrés y Providencia, que alcanza el 33.5 % de personas vacunadas.
Frente a esta situación, la Secretaría de Salud del departamento del Cesar manifestó que si bien es cierto han llegado 9.121 dosis de vacunas, todas no han sido aplicadas, ya que de estas 1.900 hacen parte de la segunda dosis del biológico de Pfizer, que se le aplicarán al personal de la salud que ya fue vacunado en una primera dosis y que todavía no se pueden aplicar, ya que no se ha cumplido el tiempo.
Cabe recordar que la vacunación contra este letal virus se está realizando por etapas, siendo la inicial para trabajadores de la salud y apoyo de primera línea de atención covid-19; así como para mayores de 80 años, población dispersa..
El departamento, según la proyección, recibiría 787.525 dosis, de las cuales 230.075 se aplicarán en la primera fase que busca reducir la mortalidad, proteger a los trabajadores de la salud, y disminuir la incidencia de casos graves de coronavirus, y 557.450 dosis, en la segunda, procurando reducir el contagio y la protección ciudadana.
Hacemos un llamado a los funcionarios, a los voceros de las EPS y las IPS (hospitales y clínicas): hay que trabajar duro en esta época pero también hay que comunicar con transparencia, oportunidad y de forma entendible para el gran público las políticas, los procesos, y las actividades que se vienen desarrollando con las vacunas, porque hay que revestir al proceso de vacunación de la mayor confianza.
Hay que informar si hay resistencia a su inoculación, y cómo se viene haciendo para que no haya renuentes a las dosis y desertores que se ponen una dosis y se creen seguros y no se ponen la segunda.
Hay que contar con todos los elementos debidamente esterilizados e higiénicos como las jeringas.
Nos jugamos el año -y muchas vidas- con la fuerza y la dinámica de la vacunación, por lo que el señor gobernador y los alcaldes, sus secretarías de Salud y toda la red médica, deben darle la primera atención, prioridad, tiempo…, queremos exigir en nombre de la ciudadanía ávida de que le demos información confiable y oportuna sobre el coronavirus.
Pero también queremos rodear la actividad de la mayor solidaridad, voluntad y esperanza. Ahí estamos y vamos a hacer seguimiento especial para acompañar la superación de escollos. Porque nos estamos jugando la reactivación económica y social que sin el soporte de la vacunación se cae.