A pesar de las constantes denuncias de los habitantes de la calle 7 del barrio Nueva Esperanza, persiste el estancamiento de aguas en invierno debido a que no han logrado que la administración municipal los apoye con la pavimentación de la vía.
Alejandra Martínez aseguró que muchos de sus vecinos no puede sentarse en la puerta de su casa porque la calle está llena de piedras, enmontada y con aguas estancadas, donde proliferan las plagas que obligan a la gente a mantener las puertas de las casas cerradas.
Alejandra contó que en el sector abundan roedores, cucarachas y serpientes que se camuflan en la maleza. La mujer teme por la salud de su pequeña hija de dos años, a quien envió a su pueblo natal, Valencia de Jesús, para evitar que adquiera alguna enfermedad.
“Frente a mi casa tienen perros y los bañan todos los días, esa agua se acumula en frente de mi terraza generando plagas y moscas además de los animales que salen del monte”, denunció.
Al respecto, el secretario de obras del municipio, Juan Pablo Morón, aseguró a EL PILON que esta dependencia contesta todas las solicitudes requeridas por la comunidad en cuanto a obras y pavimentación, pero aclaró que existe un procedimiento que es demorado.
“Hace el requerimiento, nosotros registramos la solicitud en una base de datos, solicitamos a Emdupar que verifique la existencia de redes de acueducto y alcantarillado y que estas funcionen correctamente, que es lo primero porque el municipio no podría pavimentar ninguna calle sino hay disponibilidad y certificación por parte de Emdupar. Ya luego a la medida que van saliendo proyectos de pavimentación, según la lista de prioridades sujeta a recursos se lleva a cabo el proyecto”, aseguró el funcionario.
Por Jennifer Polo / EL PILÓN