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No bajar la guardia con el cuidado de nuestros árboles y el agua

Dos de los elementos naturales más representativos del medio ambiente son los árboles y el agua, por fortuna, de ello tenemos en abundancia en Valledupar y en la región; pero, precisamente eso implica un mayor compromiso ciudadano para garantizar su conservación.

En Valledupar son muchas las acciones permanentes encaminadas al cuidado y protección de los árboles y de las fuentes hídricas, en especial de nuestros ríos Guatapurí y Cesar, entre otros. Sin embargo, no hay que bajar la guardia, porque las iniciativas adelantadas hasta el momento no han sido suficientes para mantener saludables en su totalidad a nuestros árboles, hay muchos de ellos enfermos en distintos lugares de la ciudad. Esa es una queja generalizada de la ciudadanía.

No es suficiente quejarse y denunciar, indistintamente del accionar de la institucionalidad y de algunas organizaciones dedicadas a esa misión, es necesario que cada uno de nosotros como ciudadano revisemos qué hacemos por el cuidado y protección de nuestros árboles y ríos.

Según informes, de los más de 70 mil árboles que tiene Valledupar, entre el 25 y 40 por ciento de ellos continúan enfermos desde hace cierto tiempo, cifras que ya deberían haber disminuido si se tiene en cuenta que se han adelantado programas de intervención por parte de la Gobernación del Cesar y de la Alcaldía de Valledupar.

EL PILÓN ha liderado distintas campañas y procesos a través de uno de sus programas banderas, ’Foro del Árbol’ que se realiza cada año, además del acompañamiento a organizaciones como ‘La Mesa del Árbol’, ‘Foro Ambiental del Cesar’, entre otras, escenarios estos en los que se ha difundido y orientado sobre las principales causas y comportamientos ciudadanos que deterioran la salud de los árboles.

Hemos insistido en brindar orientación para que la ciudadanía tenga pleno conocimiento que una de las principales causas de enfermedades de los árboles son las plagas y las infecciones fitosanitarias, las cuales se pueden controlar utilizando técnicas como una poda adecuada, tala controlada de árboles enfermos, uso de productos químicos bajo la orientación de un experto, esterilización del suelo y el manejo orgánico de esas plagas.

Expertos señalan que algunos de los factores que han contribuido a la enfermedad de los árboles en Valledupar son la renovación de algunas calles y avenidas, podas antitécnicas, entre otros factores que contribuyen a la aparición de plagas.

Sería bueno tener en cuenta y hacer posible la implementación del Plan de Manejo del Arbolado Urbano, proyectado y elaborado en el año 2017 por la USAID,

Y qué decir del desperdicio permanente de agua que a diario se observa en muchas calles de Valledupar, es evidente su uso indiscriminado e irresponsable. Las fugas en las tuberías, el lavado excesivo de vehículos y la falta de hábitos sostenibles en los hogares reflejan una alarmante falta de conciencia.

Este problema se agudiza en temporadas secas, cuando el caudal de los ríos disminuye y la amenaza de escasez se hace inminente.

Le corresponde a la ciudadanía hacer uso eficiente del agua, mientras que las autoridades están obligadas a implementar sanciones efectivas contra el desperdicio y garantizar un mantenimiento óptimo de la infraestructura hídrica.

Lo que se necesita es que haya voluntad ciudadana y que las autoridades hagan cumplir las normas. Existen distintos mecanismos legales para garantizar que Valledupar siga siendo una ciudad verde y que nuestros ríos mantengan su caudal natural.

Categories: Editorial
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