Cambiar ‘el chip’ para afrontar la vida, de tal manera que se logre influenciar positivamente desde el bien decir, bien hacer, bien tener y bien amar, fue la exhortación de la escritora, comunicadora social, pastora y coach, Lucy Cosme, a las mujeres que asistieron a su más reciente conferencia en Valledupar.
Para la líder cristiana que dictó de manera gratuita una conferencia en la Fundación del Área Andina, donde tuvo alta afluencia de público, es posible pasar de vivir en lo ordinario a lo extraordinario cambiando esquemas mentales. “Cualquier mujer ordinaria puede hacer lo extraordinario, pero ninguna mujer hará algo extraordinario si actúa de manera ordinaria. Es necesario un mínimo de compromiso; dejar la pobreza mental, el pesimismo, el pasado y la tristeza; enfocarse en que el presente construye mi futuro, por lo que debo obra desde ya”, recalcó.
Agregó que es necesario tener en cuenta que una mujer es parte de otras mujeres, acotando que “ser mujer es una honra en equipo, no es ser una persona individual; es dejar de lado al egoísmo. El primer pilar es decir las cosas de manera adecuada, no vamos a hablar mal de las personas a sus espaldas, no vamos a fijar nuestros ojos ni nuestra boca lo que no hemos visto”.
De la misma manera invitó a recordar que “se es más de lo que se aparenta, que se es aquello con lo que se conecta y se ha elegido ser. No dejes que tus emociones te dominen, ten siempre en mente lo que elegiste ser; y por favor nunca te compares con nadie porque cada persona es única e irrepetible”.
Acerca de la conferencista
Lucy Cosme, nacida en República Dominicana, es una reconocida comunicadora destacada de varios medios de su país. Ha dictado conferencias y seminarios en más de 40 países desde Latinoamérica, Estados Unidos y Europa.
Es directora fundadora de Hogares Villa Bendición, desde 1995. Ha sido miembro del Concilio para el Diálogo Dominicano-Haitiano, entre otros estamentos. Lanzó la obra ‘Rosas para el Alma’, que ha sido de gran aceptación en Colombia. Este libro, que fue impreso en Bogotá, fue escrito con un lenguaje de fácil lectura, tanto para mujeres como para hombres de todas las edades.
Annelise Barriga Ramírez/EL PILÓN