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Muchos lo quieren, otros lo detestan

Yo no soy un lector empedernido, leo lo que me gusta y que no sea grueso y de letras pequeñas, me deleito con los periódicos y temprano como tinto mañanero despacho El Pilón, más tarde El Tiempo y al medio día El Heraldo y para chismosear cierro con El Día.

Por El Heraldo me informo de las obras de Elsa Noguera y de los chorros de plata que la Nación invierte en la Arenosa, lo que me motivó a visitar esa ciudad para ver los parques que han sido remodelados con bombos y platillos y compararlos con los mal llamados mega parques que se han construido en Valledupar, que son unos verdaderos Centros Recreacionales que superan en todo, menos uno, aseo y mantenimiento a los de los barranquilleros.

Fui al Olaya, al Sagrado Corazón, El Eugenio Macías, Las Nieves, La Magdalena, Simón Bolívar y muchos barrios humildes, pero también Al Golf y Villa Santos de estratos altos que tienen canchas de micro y tenis, algunas alfombradas, pero ninguna con una de fútbol con grama sintética y reglamentaria, como sí las hay aquí en Valledupar que nos acercamos a diez, eso sí, las de ellos bien tenidas y limpias, muy limpias en manos de la AAA, que es una especie de Emdupar.

Aquí en Los Mayales, El Milagro, Los Algarrobillos, Villa Miriam, La Nevada, Doce de Octubre, Las Flores y La Bombonera en el Sicarare ya están construidos y para inaugurar bellos parques con canchas de fútbol alfombradas y enmalladas, varias de micro en las mismas condiciones, tenis y básquetbol, mesas para jugar ping pong y ajedrez, dama y dominó, con vías para bicicletas y peatones, que ninguna ciudad de la Costa tiene y son pocas en Colombia que ostentan estos escenarios deportivos, culturales y recreativos. Son majestuosos, lástima que no fueron mostrados ampliamente a la ciudadanía, por falta de una oficina de prensa se quedaron en el anonimato, pero tarde o temprano la ciudadanía tendrá que reconocer los inmensos logros conseguidos por el alcalde Freddys Socarrás, pues del veredicto del pueblo, de ese no se salva nadie.

Del Ecce Homo podemos decir que ya se puede ir a visitarlo, pero que auguramos un futuro oscuro para Él, porque dentro de poco la maleza se lo habrá comido ante la mirada indolente del funcionario de turno. Ojalá nos equivoquemos.

Puede Socarrás Reales sacar pecho porque los recursos municipales fueron bien invertidos y que ahí están las obras para que los Entes de control ejerzan sus funciones y con la frente en alto pueda decir a sus paisanos que cumplió su compromiso entregando una ciudad modelo y competitiva, donde en los barrios de estratos 1, 2, 3 y 4 lo quieren porque hizo mucho por ellos y en los de 5 y 6 más bien lo detestan, pero ellos y solo ellos sabrán por qué.

Se acaba el espacio, pero les deseo unas felices pascuas y que el 24 gocen hasta la saciedad, los unos con sus hijos y yo con ellos y con mis cinco nietos.
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