Con una armadura y espada aparece de manera imponente la figura de Hernando de Santana en la Avenida Salguero, como homenaje al capitán español que un 6 de enero de 1550 fundó la Ciudad de los Santos Reyes del Valle del Cacique Upar, hoy denominada Valledupar.
Valiéndose de chatarras, el vallenato Jorge Maestre hizo esta obra escultórica, que fue entregada a la comunidad en el año 2000 bajo la administración de Jhonny Pérez Oñate como regalo a la ciudad en los 450 años de su fundación.
Para el coordinador Cultural del municipio, Alberto Muñoz Peñaloza, este monumento representa el hecho propio de la fundación de la capital del Cesar. “Es favorable que la historia esté presente a través de monumentos para que no nos separemos de dónde procedemos”, acotó el funcionario, indicando que muchos historiadores aseguran que la creación de la ciudad constituyó una ruptura cultural de los aborígenes para dar paso a una simbiosis.
“Con el paso del tiempo sirvió para mostrar lo que sería Valledupar: cosmopolita que acoge a propios y extraños, que se ha nutrido con el paso de los años de un proceso intercultural por la llegada de gentes de todas las regiones del país y por el desarrollo importante como el Festival de la Leyenda Vallenata”, aseveró Muñoz Peñaloza.
¿Quién fue el conquistador?
Hernando de Santana fue un soldado español, oriundo de de Zafra (Badajoz), que con menos de 20 años se alistó en la expedición de Francisco de Montejo, para explorar la zona de Yucatán, México, dominada por los Mayas, pero el clima, la insalubridad, la malaria y los indígenas obligaron a Montejo a desistir en el primer intento.
Sus reiterados aciertos en los conflictos mantenidos con los indígenas le permitieron ascender en la jerarquía militar y obtener el título de capitán. Después de un largo tiempo abandonó el territorio mexicano, llegando a Santa Marta, Colombia, y se integraba en la conquista del territorio caribeño.
El pelotón del capitán Santana en su recorrido por la comarca del río Cesar y del Guatapurí, descubrieron un hermoso valle de tierras feraces y poblado por tribus dóciles y laboriosas, menos belicosas de las que se habían encontrado hasta entonces, y cuando terminó su cometido de someter a los negros cimarrones, teniendo permiso para ello, no quiso volver a Santa Marta sin haber poblado una ciudad en aquella tranquila zona.
Después de escoger el sitio adecuado y cumplir con el ceremonial acostumbrado, Hernando de Santana fundó la capital del Cesar.
Polémica por la ubicación
El desmonte de ‘El Tractor’ para erigir a ‘Hernando de Santana’ causó polémica en los vallenatos que sentían como propio una figura que evocaba la labor agropecuaria de la zona. Aunque tiene 14 años de estar instalado en el lugar, la gran mayoría de personas lo referencian como la glorieta del Tractor.
Desde ese entonces el monumento ‘se ha paseado’ por el hotel Sicarare, el parque del Helado, a orillas del río Guatapurí; y en la Feria Ganadera, siendo reclamado por muchos. Al respecto, el Coordinador de Cultura Municipal, asegura que el fin del alcalde Fredys Socarrás Reales es realizar un monumento realizado por algún artista local, teniendo en cuenta que el anterior representa una marca comercial (era un Fordson, de la Ford).
Su restauración
Esta obra escultórica es una de lo que menos presenta estado de deterioro. Sin embargo, hará parte del plan de restauración y mantenimiento previsto para este año por la Casa de la Cultura de los monumentos de Valledupar y Patillal, así como de los monumentos nacionales declarados por el Ministerio de Cultura: las iglesias de Badillo, Valencia y La Concepción.
Por Annelise Barriga Ramírez
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