Los medicamentos vencidos ya tienen su punto de acopio, se trata los puntos azules y permiten botar los fármacos con fecha de vencimiento que ya están pasadas, los parcialmente consumidos o de los que ya no se tiene memoria para qué se usan.
En muchas ocasiones las personas tienen elementos en casa, al alcance de cualquier persona o a temperaturas inadecuadas que se convierten en un alto riesgo para la salud de la familia.
Esta semana en Valledupar estuvo en representación de la industria farmacéutica en Colombia, la Corporación Punto Azul, entidad sin ánimo de lucro, que busca afianzar los lazos comunes con la cadena de valor del sector farmacéutico en la generación de mecanismos de desarrollo para el consumo sostenible de medicamentos en Colombia.
EL PILÓN abordó el tema de cuál fue el motivo de poner en marcha los denominados puntos azules en diferentes ciudades, además del cuidado del medio ambiente. De esta manera lo explicó Jorge Enrique Trujillo, director ejecutivo de la Corporación Punto Azul.
EL PILÓN: ¿En qué consistía la actividad de la Corporación Punto Azul en Valledupar?
Jorge Trujillo: Fue una campaña masiva con todos los gremios de la región del Cesar para trabajar en la implementación del proyecto Punto Azul, una iniciativa de la industria farmacéutica en el marco de la responsabilidad social corporativa para generar impactos positivos en el medio ambiente y prevenir el problema de salud pública de falsificación, adulteración y contrabando de medicamentos.
EP: ¿Cómo se lleva a cabo esta iniciativa?
JT: La Corporación Punto Azul ubica contenedores en droguerías y almacenes de grandes superficies para que la comunidad tenga acceso a estos puntos y deposite ahí medicamentos vencidos, parcialmente consumidos, empaques y envases, con el fin de que no terminen en las fuentes hídricas, rellenos sanitarios y posteriormente los terminemos consumiendo en el agua que llega a nuestros hogares. Adicionalmente que lleguen a manos inescrupulosas y sean fuente de falsificación, adulteración y contrabando.
EP: ¿El proyecto ya está en el Cesar?
JT: El programa tiene 15 años en el país y estamos en 24 departamentos, llevamos 15 meses en el Cesar y hemos recolectado 282 kilogramos y en lo que falta de este año aspiramos recolectar 200 kilos adicionales. El programa ha tenido una dinámica en el país muy interesante, cerraremos al final del año con más de 250 toneladas de medicamentos vencidos y para dentro de cinco años esperamos recolectar por año más de 1.500 toneladas.
EP: ¿Cuál es el perjuicio si no se llevan los medicamentos vencidos a un lugar seguro?
JT: El primer impacto de cuando uno bota esto a la caneca de basura, lo hecha por el lavamanos, es que cuando esto llega a un relleno sanitario se generan proceso químicos, entonces por debajo de la tierra terminan estos principios activos llegando a las fuentes hídricas, es un problema delicado que da resistencia bacteriana y muchas cosas, por eso son considerados residuos peligrosos según el Ministerio de Ambiente. Por otro lado, cuando otra persona los falsifica o los adultera puede poner cualquier producto que no es el medicamento y si la gente los consume generaría problemas de salud serios.
EP: ¿Existe consciencia por las personas de llevar medicamentos vencidos a un sitio seguro?
JT: Falta mucho, es muy importante que medios de comunicación como EL PILÓN trabajen en este importante mensaje porque sin duda la gente no tiene la cultura y no se toma su tiempo para llevar los medicamentos que tienen en la mesa de noche, en el baño para llevarlos a un Punto Azul. Sin duda la gente debe tomar consciencia en este tema porque cualquiera de ellos puede consumir un medicamento falsificado o adulterado, pero igualmente el medio ambiente es de todos.
EP: Al Cesar llegan medicamentos de Venezuela y Ecuador de contrabando, no pagan impuestos, ¿aumenta el riesgo para el consumidor?
JT: Sin duda alguna, nosotros hacemos parte de un comité de trabajo que lidera el Ministerio de Salud y Protección Social de la mano con la Procuraduría y la Policía Fiscal y Aduanera, en un grupo contra el crimen farmacéutico, nosotros no somos un ente policivo, pero sí hacemos ese trabajo de concientizar a la población del uso adecuado de los residuos de los medicamentos, es importante que cuando lo compre lo revisen y vean los logos del laboratorio, la fecha de vencimiento y el sello del Invima.
EP: ¿Cuáles son las conclusiones de la reunión en Valledupar?
JT: Un balance positivo, de la mano con Asociación Colombiana de Droguistas Detallistas, Asocoldro, estuvimos en reunión con todos los droguistas del departamento y vamos a trabajar en la sensibilización desde que la persona compra el medicamento. En un año nuevamente estaremos en Valledupar para presentar el balance de la progresividad del programa que nos deja esta iniciativa.
En el Cesar, Punto Azul ha recolectado 282 kilogramos y espera que a final de año obtener otros 200 kilos adicionales.
Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
carlos.jimenez@elpilon.com.co