Durante cinco meses el municipio de Pueblo Bello vibró con las emociones del fútbol once en el Torneo Giovanni Soto que contó con la participación de 17 equipos.
El pasado domingo 23 de diciembre se jugó la gran final entre los equipos Ariguaní FC vs. Mecánicos FC en la cancha del barrio Giovanni Soto. En el partido de la gran final, el equipo de los mecánicos terminó imponiéndose por marcador de 1-0.
Desde el inicio del partido ambos equipos empezaron a mostrar sus armas futbolísticas y no dejaron espacio para la especulación, ninguno de los dos conjuntos salieron a defenderse y el buen fútbol fue el protagonista en los primeros 45 minutos.
Kevin Tamayo, quien terminó siendo el goleador del torneo, marcó la única anotación del partido, sin embargo, el equipo Ariguaní fue el dominador del encuentro con llegadas claras, pero su goleador Yorman Marín no pudo concretar.
El delantero no fue efectivo a la hora de disparar a la portería y terminó despilfarrando opciones que pudieron darle el título a su equipo que vio cómo la falta de definición les pasó la cuenta de cobro.
Con el transcurrir del partido y la calentura de los jugadores el árbitro tuvo que intervenir, pero los entrenadores de los dos equipos no quedaron contentos con el arbitraje. “Fue un pésimo arbitraje, ni siquiera el equipo ganador celebró el titulo, es una pena que un partido tan bien jugado por los dos equipos haya terminado tan mal por decisiones arbitrales que no eran correctas”, expresó Orlando Navarro, director técnico del equipo Ariguaní FC.
Finalmente, el entrenador subcampeón felicitó a sus futbolistas por el juego que mostraron: “Como entrenador me siento contento porque mi equipo mostró buen fútbol, hicimos todo lo que habíamos entrenado, y aunque no tuvimos suerte a la hora de definir demostramos que podemos jugarle de tú a tú a quien sea”.
El torneo del barrio Giovanni Soto terminó en medio de las polémicas. Además del tema arbitral, los cuatro equipos que llegaron hasta las instancias finales no quedaron conformes con la premiación.