Desde el más pequeño hasta el más grande reconoce el nombre de Diomedes Díaz y lo que este sigue significando para el folclore vallenato. Aunque difícilmente nazca uno igual a él, su dinastía sigue comprometida a mantener vivo su legado musical.
‘El cacique de La Junta’ tuvo muchos hijos y varios de ellos tienen la mejor herencia que su padre les pudo dejar: la voz, el talento para cantar y encantar al público. Rafael Santos, el hijo varón mayor de los Díaz, Diomedes de Jesús, Luis Ángel, Elder Dayán y el fallecido Martín Elías, son algunos herederos de ese gran talento.
Rafael Santos Díaz Acosta nació de la relación que tuvo Diomedes Díaz con Patricia Acosta, su primera esposa. Él también es cantante y ha incursionado en la pantalla chica interpretando a su padre en las bionovelas de Patricia Teherán y Rafael Orozco, incluso, se interpretó así mismo en la bionovela que hicieron en honor a su hermano Martín Elías Díaz.
El medio de comunicación El Heraldo le realizó una entrevista en meses pasados, donde Santos dejó muy claro que le encanta la televisión e interpretar a personajes de su familia con el fin de que todos los televidentes conozcan más de cerca cada grano de arena que aportó, y sigue aportando, su familia al folclore vallenato.
Aunque ‘El turpial’ también indicó que sufrió mucho al momento de actuar las muertes de su padre y su hermano, pues “revivir esos momentos, ese dolor, fue muy duro”. Santos manifestó que “tenían que parar el rodaje”, darle un tiempo para establecer sus emociones y poder continuar con la escena.
En dicha entrevista, Rafael Santos recordó a su hermano Martín Elías, pues desde muy niño le tocó asumir el papel de padre. En ese momento el intérprete de ‘La reina’ se encontraba en la cárcel y con problemas de salud, por ello le pidió a su hijo mayor que se hiciera responsable de la familia, en especial de Martín Elías, quien era el menor en ese momento.
“Desde muchacho me tocó asumir muchas responsabilidades, fui educado para servir a la familia y ser el respaldo de mis hermanos… Mi padre me decía que después de él, venía yo, él confiaba mucho en mí y por eso me encargó a la familia, a mi mamá, a mi abuela, para que el día que él faltara, ellas no estuvieran desamparadas”.
Para Rafael Santos servirle de ejemplo a sus hermanos fue asumir el mayor reto de su vida, pues a corta edad le tocó dejar a un lado los juegos y el estudio para poder estar al tanto de las responsabilidades del hogar, aunque dejó en claro que no dudó en hacerlo por ningún momento y que se siente orgulloso de lo que logró hacer en la vida de Martín.
“Yo me encargué de enseñarle a cantar, a versear, a componer desde muy niño. Mi padre me lo entregó cuando él tenía 5 años y confieso que es de las responsabilidades más grandes que he asumido. Mi padre me pidió que suspendiera mis estudios y me fuera a trabajar para sostener a la familia… Martín Elías me permitió ser padre a los 15 años, yo no estaba pendiente de jugar con carros o de ir al parque, sino de cumplir con las tareas que mi papá me encomendó, en especial la crianza de Martín por ser el menor de la familia”.