Entre Otras Cosas…
Por: Dario Arregoces
Miembros del P.R.D.(Partido de la Revolución Democrática) mexicano, encabezados por Lisbeth Rosas y Leonel Luna, han presentado a consideración de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, un proyecto de ley que pretende dar al matrimonio una vigencia de dos años, al cabo de los cuales, sí la relación no es armoniosa terminaría su vigencia sin que sea necesario agotar el trámite judicial del divorcio. Consideran los citados asambleístas -entiéndase congresistas- que sería esta la forma más expedita de evitar los trámites de divorcio, pues las estadísticas dicen que de los 33.000 matrimonios contraídos en el Distrito Federal, entre el 2009 y el 2011 hay en procesos de divorcio 16.0000.
Asimismo, sostienen los defensores de la iniciativa, que además de lo engorroso que resulta el trámite de divorcio, está el tema de la descongestión judicial y el tema económico.
La Iglesia Católica, que en su momento se opuso radicalmente al matrimonio entre parejas homosexuales, sin que pudiera evitar su aprobación, expresó su desacuerdo frente a esta iniciativa, a través de su vocero Hugo Valdemar, portavoz de la Arquidiócesis Primada de México, quien califica de “absurda y contraria a la naturaleza del matrimonio”. Y considera además: “Que con ella se pretende trivializar el matrimonio”. Es de recordar que México es el segundo país con mayor población de católicos en el mundo, después de Brasil y que, a pesar de ello, iniciativas que atentan contra la sagrada institución del matrimonio han sido aprobadas por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, corporación en la que el partido de izquierda –P-R.D.- cuenta con las mayorías.
El matrimonio es considerado por la Iglesia, como remedio a la concupiscencia, entendida esta, como la vida libertina y licenciosa. Lo novedoso aquí, es que pareciera que dicho remedio, en lo sucesivo, y de salir avante la iniciativa, ya no sería para toda la vida, sino que tendría fecha de vencimiento, que las partes podrán pactar libremente, con derecho a renovar los votos matrimoniales cada dos años, o declararlo terminado.
Para no entrar con el tema de Sodoma y Gomorra y la pérdida de valores sociales, me permito citar la obra “El Origen de la Familia la Propiedad Privada y el Estado”, de Federico Engels -emblemático defensor del materialismo histórico y del materialismo dialéctico- el cual recoge investigaciones de distintos autores que como Bachofen, quien señala que dentro de la evolución histórica de la familia y encontrándonos en la frontera del salvajismo y la barbarie, nace la familia Sindiásmica, conformadas por parejas heterosexuales, que se unen en matrimonio y cuyo vínculo es frágil, al punto que podía disolverse, a condición de que la mujer se quedase al cuidado de los hijos.
Considero que iniciativas como esta, a las que muy pronto nos veremos avocados en nuestro país, son fruto de la involución de la institución familiar, que ponen en entredicho si realmente es la familia el núcleo fundamental de la sociedad, como lo afirma nuestra Carta Política.
LA FRASE DE CIERRE:“Por tanto la evolución de la familia en los tiempos prehistóricos consiste en una constante reducción del círculo en cuyo seno prevalece la comunidad conyugal entre los dos sexos…” Federico Engels. Obra: “El Origen de la Familia la Propiedad Privada y el Estado”.
darioarregoces@hotmail.com
Valledupar, Octubre 1°de 2011