“Llegué aquí para cumplir un sueño y es hora de despertar. El sueño se terminó pero duró más de lo que jamás yo hubiera pensado”, confesó Javier Mascherano, en el día de su adiós como jugador del Barcelona.
El club Catalán le dio la despedida este miércoles con todos los honores al jugador argentino mediante un evento en el auditorio 1899 del Camp Nou, acompañado de toda la plantilla azulgrana, además de sus excompañeros Carles Puyol y Eric Abidal, del cuerpo técnico y la cúpula directiva.
En su recorrido profesional como jugador de fútbol ha obtenido 18 títulos que ha ganado durante siete temporadas y media, en las que defendió 334 veces la camiseta del Barça: dos ligas de campeones, cuatro ligas, cuatro copas del Rey, dos supercopas de España y dos mundiales de clubes.
“No me quedo con los títulos, sino con el día a día, con haber podido disfrutar de momentos únicos y de haber tenido la posibilidad de jugar con los mejores del mundo”, explicó el deportista internacional que ahora irá rumbo al Hebei China Fortune tras convertirse en el tercer extranjero que más veces ha vestido la elástica azulgrana, un poco atrás de Leo Messi y Dani Alves.
El equipo deportivo del Barcelona pagó 24 millones por un mediocentro defensivo que acabó reconvertido a central. Durante su permanencia durante muchos periodos, expresó que “el Barça es un club especial” y agregó además “su grandeza se puede ver en todo el mundo y creo que viene dada por los valores que transmite”.
Manifestó que no esperaba llegar al club y encontrarse con un ambiente agradable y servicial como es el Barcelona, apuntó que cuando llegó “pensé que me iba a encontrar con un vestuario difícil, por los grandes jugadores que había y por todo lo que se había ganado anteriormente, pero fue todo lo contrario. Me encontré con un grupo humano espectacular. El vestuario fue el secreto de que el Barça haya estado allá arriba todos estos años”.
Sus compañeros durante su despedida le hicieron entrega de un vídeo por donde emitieron diferentes mensajes de agradecimiento que han grabado de forma individualizada, incluido el excapitán Xavi Hernández, ahora centrado en el fútbol catarí.
A sus 33 años, el ‘Jefecito’ como era denominado por fin dio pie a una decisión que había estado analizando durante algún tiempo. “A veces, uno tiene que aceptar la realidad y la mía es que ya no era el jugador que había sido antes y que ya no tenía las mismas fuerzas para pelear por un puesto”.
Por su parte, Mascherano agradeció la confianza y ofrecimiento al respecto de manejar unos de los clubes de fútbol más importante en la liga española, aunque también ha reconocido, con una sonrisa, que la posibilidad de volver como entrenador es “más un deseo del club”. Sostuvo además que en algún momento. “quizá me gustaría probarlo”.
El futbolista de San Lorenzo dejó su dorsal ’14’ en el vestuario y también el brazalete de cuarto capitán, un cargo que piensa que podría desempeñar perfectamente Gerard Piqué. “El cuarto capitán lo votarán los chicos, como ha pasado en los últimos tiempos. Pero está claro que ‘Geri’ es un jugador y una persona que tiene muchísima ascendencia en el grupo y podría serlo perfectamente porque, no siendo capitán ha sido una pieza valiosísima que ha ejercido de capitán”, ha argumentado Mascherano, quien este jueves se llevará otro merecido homenaje, el de todo el Camp Nou, antes del derbi copero contra el Espanyol.
Por: EFE