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Más cuidado con los niños

Lamentables los últimos hechos ocurridos en Valledupar, relacionados con menores de edad, que por imprudencia o descuido, han resultado muertos o heridos debido a accidentes caseros. En menos de una semana tres hechos prenden las alarmas sobre el debido cuidado que deben tener los menores, especialmente en sus primeros años de vida.

Un niño se tragó dos monedas y tuvo que ser intervenido, otro se ahogó en un balde de agua y hace dos días uno más murió asfixiado con un mamón. Y hace diez días un menor de 12 años murió ahogado en el río Guatapurí.

El cuidado de los infantes es exclusiva responsabilidad de los padres y debe ser en el hogar donde se procure su bienestar y seguridad. Estos casos dan pie para hacer un llamado a las familias donde tienen menores para que estén atentos y revisen las condiciones de riesgos que puedan existir en sus viviendas. Un balde con diez centímetros de agua es suficiente para que un bebé se ahogue, por ahí se debe comenzar, a disminuir riesgos en los hogares.

Especialmente ahora que vienen las vacaciones escolares de mitad de año, los padres de familia deben tener cuidado con los niños porque van a pasar más tiempo solos en las casas, muchas veces sin la compañía de un adulto. Se debe hacer el máximo esfuerzo para que no ocurran casos como los de los niños ahogados en el Guatapurí y en el balde o el pequeño que se tragó dos monedas.

En esta situación es importante que las autoridades emprendan una campaña sobre el debido cuidado de los infantes. El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, tiene su propósito claro y generalmente se ocupa de velar por el bienestar de los menores y si observa o conoce que un menor es maltratado en el núcleo del hogar, si es desatendido, puede proceder a evaluar los casos y quitar la patria potestad a los padres.

Aunque la naturaleza humana indica que los padres deben cuidar a sus hijos, no sobra un mensaje, una recomendación o un consejo para velar por el bienestar de estos. Desde esta tribuna hacemos un llamado, especialmente a los jóvenes, que por diversas circunstancias ya asumieron las lides de padres, a que estén más atentos y asuman su responsabilidad como debe ser.

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