El agro no levanta cabeza y la situación es tal que incluso el maíz ya dejó de cultivarse para sacar grano y ahora lo siembran para ensilaje.
Los bajos precios y el clima, son algunos de los factores que golpean este sector, por lo que, a los cultivadores les sale más rentable sembrar para sacar silo a fin de tener alimento para el ganado en temporada seca, que producir grano para venderlo en el mercado.
El clima para finales de este año ‘pinta' de normal a seco, por lo que las cosas no están claras sobre el área de maíz a sembrar.
A voz del ingeniero de la Federación de Cerealistas, Fenalce, David Iriarte Mosquera para la próxima cosecha las expectativas no están muy claras, por lo que se perfila para silo.
“En este primer semestre debe salir poquita cosecha porque se bajó el área como en un 40%, lo nuevo en la zona plana es sembrar para ensilaje, porque la mayoría de personas que siembran maíz son ganaderos y como se avecina el verano de diciembre, enero hasta marzo, entonces prefieren hacerlo silo”, dijo Iriarte.
El maíz para silo se cosecha a los 70 días, mientras que para grano debe salir a los 90 días y requiere de más agua, por lo que les resulta más rentable almacenarlo para el ganado.
Una hectárea de maíz produce entre 4 y 4,5 toneladas de maíz, cuyo precio oscila entre 700 y 800 mil pesos de acuerdo a la época; mientras que la misma área produce entre 25 y 30 toneladas de silo cuyo valor es de 250 mil pesos tonelada.
Una hectárea de maíz amarillo deja ganancias de 500 mil pesos si no se cuenta con el subsidio que otorga el gobierno; si es blanco, la utilidad puede ser de 300 mil pesos; de ahí que según Iriarte el productor debe acogerse a las ayudas del gobierno para que aumente su beneficio.
La reducción
En el primer semestre del año y debido a los anuncios del Ideam sobre temporada seca, los maiceros sembraron alrededor de 7.000 hectáreas en el Cesar, entre maíz tradicional y tecnificado.
Según Iriarte esta baja de casi el 40% obedeció que desde un principio tanto el clima como los precios no ‘pintaron' bien, pero se espera que para la próxima cosecha, que los maiceros tengan mayor conocimiento sobre los subsidios, pueda aumentar el área.
Sandra Santiago B.
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