En un completo ‘dolor de cabeza’ se ha convertido la falta de cultura de los propietarios de vehículos de tracción animal en Valledupar.
En la capital del Cesar hay cerca de 800 carro de mulas, 350 de los cuales pertenecen a la Asociación de Propietarios de Vehículos de Tracción Animal, que hoy son blanco de críticas por los habitantes de la ciudad debido al uso indebido de sus acciones.
Vislumbrando las declaraciones de personas como María Cristina Murgas, residenciada en el barrio Esperanza Norte, este diario encontró que varios conductores de este tipo de vehículos tiran las basuras, sin ninguna restricción, en parajes solitarios o lotes enmontados después de haber cobrado a un usuario entre 10.000 y 20.000 pesos por retirar los residuos de sus casas.
Aunque el Gobierno Nacional, mediante el Decreto 1666 del 12 de mayo de 2010, ordenó la sustitución de los carros de mula, ni en la capital del país, y menos en las ciudades de menor población se ha logrado controlar el suceso, pero la administración municipal estable que el hecho se produce, además, por la falta de cultura ciudadana de los propietarios de predios, que no cercan o cierran el territorio y esto hace más fácil la tarea a los carromuleros, así lo alertó el secretario de Gobierno Municipal, José Alfonso López Vásquez.
“Todo tiene que ver con un solo tema: cultura. La cultura ciudadana de los vallenatos se está perdiendo, entonces, todo lo que se requiere que el ciudadano aporte, se le debe exigir mediante medidas coercitivas, no lo están haciendo como debe ser por propia voluntad, porque se les desvaloriza el lote, puede ser objeto de invasión, porque causa problema de inseguridad, no, la gente para que haga eso necesariamente hay que combinarlo con una multa”, fue la declaración de López Vásquez.
Pero el jefe de Gobierno indicó que “mientras el problema de los lotes enmontados no se acabe, hay que seguir con la medida de sancionar a las personas”, y esto le daría un alivio a las comunidades donde hay lotes enmontados, que son los utilizados para tirar todo tipo de desechos.
Agregó “los lotes enmontados siempre han existido, pero ahora con mayor énfasis, porque la gente todo se lo achaca a la situación económica, pero sí se va a preguntar por el precio de un lote abandonado, le vale un mundo de plata, pero para limpiarlo no hay, y para pagar los impuestos tampoco”.
Sin solución a la vista
El presidente del Concejo de Valledupar, Iván Lúquez Mindiola, plantea por estos días la conformación de un comité interinstitucional que haga cumplir la ley nacional sobre la sustitución de los vehículos en esta capital.
Al presupuesto municipal 2014, le fueron agregados 400 millones de pesos para el proyecto de sustitución de vehículos de tracción animal en Valledupar, y aunque en Bogotá, a partir del 1 de enero de este año comenzó a regir el nuevo decreto que impide la circulación para los mismos; la circulación sigue y pocos han sido los controles de las autoridades en todo el territorio colombiano.
Según las estadísticas de la Secretaría de Movilidad, 2.890 personas han participado en el proceso de sustitución en la capital de los colombianos, y en la ‘Ciudad de los Santos Reyes’ aún no se conoce el primer caso.
El año anterior, la secretaria de Gobierno encargada, Olarys Oñate indicó que en enero de 2014 se iniciarían los trámites para que los carros de mula no circularan más en la capital del Cesar, motivo por el que buscaban mecanismos para generarles soluciones pertinentes a los integrantes de este gremio.
De igual manera, recalcó que la Alcaldía estaba tratando “de poner unos sitios estratégicos” para el depósito de podas, debido a que supuestamente los vehículos debían salir de circulación este mes: “y es un proceso del cual nos estamos preparando. Queremos que ellos trabajen en las podas y obtengan de ahí su sustento”, dijo.
Hoy la administración estudia la posibilidad de entregar proyectos productivos a las personas que deberán dejar el oficio, con el fin de ayudar a las soluciones laborales.
Sin controles
Los residentes cercanos a la carrera 19D con calle 6D del barrio La Esperanza Norte, indicaron que hay “una pelea casada” con dueños de los carros de mula, debido a la falta de cultura y de consciencia de quienes, en su mayoría menores de edad, llegan hasta un predio descuidado a tirar lo que recogen por varios puntos de la ciudad.
“Uno sale a regañar a una persona de estas, y lo primero que le dicen a uno es ‘cállese vieja chismosa’, y no es posible que las autoridades no hagan nada al respecto. Estamos buscando es el beneficio de la comunidad”, declaró Maira Moya.
“Los lotes enmontados siempre han existido, pero ahora con mayor énfasis, porque la gente todo se lo achaca a la situación económica”.
Por Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
carlos.jimenez@elpilon.com.co