Una diversidad de escenarios culturales, naturales e históricos podrán visitar los turistas y propios de Valledupar durante el desarrollo del Festival de la Leyenda Vallenata ‘Rey de Reyes’ que se hará en homenaje al cantautor Jorge Oñate, ‘La Leyenda’.
Entre esos hay una serie de monumentos y lugares con un valor histórico que representan las expresiones artísticas o folclóricas de la música vallenata, un género que no solo caracteriza las costumbres de los aproximadamente 463.218 habitantes que tiene la ciudad sino también a otros del noreste de la región Caribe colombiana.
Si de conocer las figuras de la historia cultural de Valledupar se trata lo más recomendable será pasar por las siguientes esculturas: La Pilonera Mayor, localizada a pocos metros del Parque de la Leyenda Vallenata, hecha en honor de la exministra de Cultura, Consuelo Araujonoguera, impulsora del festival.
Otra es ‘Mi Pedazo de Acordeón’ realizada en homenaje a Alejo Durán, primer ganador del concurso de acordeoneros, y ubicado en el barrio Las Marías. También está la glorieta de ‘Los Músicos’, ubicada en La Ceiba, que representa a los instrumentos clásicos de la música vallenata.
LOS CANTANTES
Mención aparte merecen las esculturas construidas en honor a los artistas vallenatos que en su mayoría se encuentran en el parque de la Provincia y la glorieta ‘Los Juglares’, que están a pocos pasos del balneario Hurtado.
En los sitios se podrán apreciar y fotografiar al ‘Rey de la nueva ola’, Kaleth Morales, la de la ‘Voz tenor’, Iván Villazón y la del ‘Cacique de La Junta’, Diomedes Díaz junto con el de su hijo Martín Elías, así como también la del cantante Carlos Vives.
A las afueras de la ciudad, exactamente cerca de la Terminal de Transporte, se encuentra la escultura del cantante Peter Manjarrés, inaugurada el 4 de diciembre de 2019 en la glorieta País Vallenato.
Finalmente, también está el busto en honor al ‘Jilguero de América’, el cantante Jorge Oñate, localizado en el barrio Don Alberto, y la escultórica obra que da vida al compositor Leandro Díaz, ubicada en la intersección de las carreras 9 y 12 de Valledupar.
LOS BALNEARIOS
Otro de los atractivos que tiene la ciudad son sus balnearios y espacios naturales que están dentro y fuera del casco urbano.
Siendo el más representativo el balneario Hurtado donde se pueden bañar y encontrar una serie de negocios para comprar comidas típicas y accesorios artesanales de la región.
A unos cuantos kilómetros está la Escuela Ambiental, un área que ofrece diversos paisajes para aprender y valorar la naturaleza, sobre todo en los menores de edad.
“El niño que llegue acá puede interactuar con los animalitos y las plantas, se junta de tierra, se baña usando el río y se le hace entender que esta es la fuente y riqueza más grande que tenemos”, manifestó Olmar Fernando Quintero, fundador del sitio.
En la escuela también podrán disfrutar de senderismo programados para apreciar las riquezas de la naturaleza ya sea de manera grupal con familia, alguna empresa, universidades o colegios, entre otros.
El mirador del Santo Ecce Homo es otro escenario que podrán disfrutar caminando para apreciar la ciudad en compañía de amigos o familiares.
LA MINA
A unos 40 kilómetros de la ciudad se encuentra el balneario La Mina, un estupendo lugar rodeado por unas imponentes e inmensas rocas por donde pasa el río Badillo.
Se ubica en el piedemonte de la Sierra Nevada de Santa Marta, por lo que ofrece grandiosos paisajes.
Otra opción es el balneario La Vega que está a escasos 20 minutos de la ciudad, sobre la vía que conduce al corregimiento de Patillal donde no solo podrán refrescarse de las aguas del río Badillo sino también disfrutar de la gastronomía de la región.